Un amor como la temporada de cerezos

Las cosas comenzaron de una manera muy hermosa la temporada de cerezo es aquella temporada del amor y la esperanza, dura poco tiempo, pero es la mejor… Una primavera es la estación más hermosa pero toda estación llega a su final y es ahí es cuando nos toca despertarnos y ver la realidad esta historia es para contarles de mi primer amor (Adrián) como la temporada de cerezo, fue una temporada especial en la que me enamore, lo ame demasiado, pero la estación llego a su fin las cosas tomaron un rumbo diferente a lo que me imagine, supongo que fue el hilo del destino y no pude evita tampoco cambiar…

Hace tres años y medio una época maravillosa donde todo comenzó, él llego de intercambio a mitad del año al principio era difícil tratar con él, era serio y frio como el hielo en invierno, fue difícil pero no imposible… Fue aquella vez cuando llegue tarde al colegio en aquel tiempo el auxiliar era muy estricto, la tardanza era consecuencia  estar arrodillada durante las primeras horas de clases. Pues aquel día era la primera vez que llegaba tarde, tuve miedo por lo que no sabía qué hacer en cuando vi a Adrián tuve una idea y como era nuevo era de esperarse que no sabía las consecuencias lo tome de la mano y lo lleve detrás del colegio ahí se encontraba un pequeño muro por cual se podía escalar con ayuda para eso lo necesitaba; le comente mi idea, acepto me ayudo a trepar, él pudo solo y eso me sorprendió me sentí un poco molesta de que él pueda hacerlo solo y yo necesite ayuda por un momento no quise que me ayudara a bajar dije que bajaría sola pero al ver la altura no podía, avergonzada y le dije que me ayudara y sin poner peros el me ayudo…

Desde entonces nos hicimos amigos salíamos a caminar, solía tocar el piano, le encantaba la lluvia igual que a mí, hasta que nos enamoramos durante ese tiempo fuimos felices pasamos momentos inolvidables, incontables no había razón para pasarla mal ya que él era el amor de mi vida, siempre estaba ahí el tiempo pasaba como una brisa pasajera…

Durante el primer año y medio fueron los mejores momentos más maravillosos de nuestra vida.

El 24 de diciembre antes de la media noche quedamos de vernos en un parque al que siempre solíamos ir, llegue antes de la hora indicada estaba emocionada hacia frio pero eso no importo… Mientras esperaba la hora pasaba y pasaba ya casi llegaba la hora indicada y la emoción aumentaba Adrián aun no aparecía era raro porque él siempre era puntual, al llegar la media noche cuando las bombardas, cohetecillos reventaban y la gente gritaba «feliz navidad» y se abrazaban, sentí una fea sensación pero no tome importancia y seguí esperando paso la media noche y aun no llegaba ya a las dos de la mañana me retire del lugar tenía las manos heladas acompañada de muchos sentimientos estaba triste, preocupada, enojada  y me preguntaba porque no había llegado, que le habría pasado, cuando llegue a casa mi abuelo permanecía despierto abrece a mi abuelo y le comente que no había llegado, él me dijo:

• Tranquila hija, tal vez algo lo entretuvo o paso algo no te preocupes, pregúntaselo mañana, ve a descansar…

Al día siguiente de camino al colegio planeaba como decirle:

Tuve muchas ideas y planeaba cual lo diría:

• Lo siento mi madre no me dio permiso.

Mmmm…

• Adrián te ocurrió algo anoche, no sabes cuánto tiempo te estuve esperando.
• Oyee, podrías haberme avisado que no irías y no hacerme esperar por tanto tiempo, hacia frio casi me cógelo…
• Adrián perdóname yo pensaba ir sin falta, pero mi madre me pidió que la ayudara y no fui, no pude ir…

No pude ir, esa palabra se repetía en mi mente seguí caminando subí las escaleras tome un suspiro y cuando entre al salón todos estaban tristes otros lloraban esa sensación que sentí a la media noche nuevamente apareció, sorprendida lo mire, camine hasta mi lugar y pregunte: ¿Qué sucede? ¿Qué pasa? díganme ¿Por qué todos están así? ¿Qué paso? Alguien hable grite:

Y de pronto sentí un nudo en la garganta y un dolor intenso en el pecho que casi no me dejaba respirar de pronto Diego (mi mejor amigo) se levanta de su asiento y me dice con una voz de tristeza que dice: “Adrián… a muerto” aún recuerdo las primeras palabras que dije: ¿De qué están hablando? … ¿Qué quieren decir? Y Natalie quien siempre estuvo enamorada de Adrián, reitero y dijo: es cierto tuvo un accidente “Adrián está muerto” y es por tu culpa, Mariel otra compañera y amiga agrego con lágrimas en los ojos que un auto lo había atropellado…

Las lágrimas comenzaron a rodar una tras otra, Imposible anoche íbamos a reunirnos, no podía dejar de llorar inmediatamente salí corriendo Diego me detuvo en las escaleras.

Me pregunto: Espera ¿A dónde vas?

Yo le decía: tengo que irme, tengo que hablar con él, debo verlo, debo decirle algo, anoche íbamos a reunirnos, le prometí que no lo olvidaría debo decírselo, tengo que verlo una vez más, que voy a hacer, no quiero olvidar su rostro no quiero olvidarlo, que voy a hacer…

Diego me sacudió dijo que ya estaba muerto y no podía hacer nada, yo solo quería ir a buscarlo y ver su rostro para no olvidarme pero cuando Diego me soltó, no tenía fuerza para caminar quería decirle lo mucho que lo amaba solo quería verlo aunque sea por última vez, sentí un tremendo dolor en el corazón sentí que se partía en mil pedazos, no podía dejar de llorar; de pronto el cuento de hadas se había convertido en una pesadilla de la que quería despertar, no tenía ganas de vivir lo único que deseaba era verlo otra vez, solo una vez más, sentía un vacío que no podía ser llenado con nada…

Al regresar a casa me lavé la cara luego prendí la radio y en esos momentos sonó un tema que me encantaba oírla también era la preferida de Adrián “a Melody of tears (una melodía de lágrimas)” esa era nuestra melodía al escucharlo solo podía pensar en él, en las caminatas, en su sonrisa, en los momentos que pasamos juntos y no me quedaba de otra solo llorar al recordarlo, mi abuelo al verme triste me abrazo y me consoló, mi abuelo ya estaba enterado de lo ocurrido…

El entierro fue en otro lugar al que no pude viajar.

Por esos motivos no pude despedirme, solo me quedaba vivir con mi dolor y el consuelo de mi abuelo ya que a mi madre no le importaba, paso el tiempo poco a poco pero el vacío y la tristeza que dejo Adrián el aún permanecía en mi corazón y en mis recuerdos no pude olvidarme de él.

Paso un mes para mi fue una eternidad con ese dolor para ser poco el destino me tenía preparado otra perdida, mi abuelo la única persona que me había apoyado y ese tiempo fue demasiado duro no quería vivir primero había perdido al amor de mi vida luego a mi consejero mi querido abuelo ambas personas que amaba mucho ya no estaban cerca de mí, las esperanzas de vivir se había acabado cada segundo, cada minuto, cada hora se me hacía eterno y la vida que llevaba era miserable porque en cada lugar, cada olor, cada melodía, cada estación hasta el más pequeño detalle siempre me recordaban a mi abuelo y Adrián que podía hacer todo estaba de cabeza y no sabía a donde ir… Muchas veces sentí que no tenía sentido seguir viviendo intente suicidarme una y otra vez, pero cuando estaba a punto de cortar mis venas, saltar a un abismo o ahorcarme siempre había algo que me detenía recordaba a mi abuelo hablando de mi futuro Adrián riendo que decía lo que quería para nuestro futuro, esas fueron las razones que me impulsando a seguir con vida, aunque fue muy difícil…

Los primeros años fueron realmente difíciles hasta que aprendí a aparentar que ya lo había superado, pero por dentro seguía destrozada porque mientras más intentaba olvidarlo más claro recordaba.

Tres años después estaba por comprometerme con Diego éramos amigos desde el jardín de niños él me amaba pero yo a él solo le tenía un cariño así que decidí darle una oportunidad y también a mí, el día en que fijamos el compromiso me dirigí a entregar un trabajo y cuando baje del taxi me pareció ver a alguien conocido era el, mi primer amor Adrián en mi mente pensaba “Estaré alucinando otra vez” baje la mirada, cerré los ojos, tome un respiro y cuando volví a ver no había nada por lo que solo continúe mi camino.

Al terminar tuve que ir al salón de belleza para hacerme un peinado para luego ir directamente al local, cuando salí vi que empezaba a lloviznar, me encantaba la lluvia, me quede observando cuando de pronto, lo volví a ver frente a mí, él estaba ahí quede perpleja lo tenía a unos pasos caminaba como siempre alegre como si no le importara nada, sabía que era real luego desapareció entre la multitud lo seguí sin saber a donde había ido de algo si estaba segura que estaba vez no estaba alucinando la lluvia aumento más y más lo busque sin encontrar ninguna pista, pero en esos momentos lo que más quería era encontrarlo estaba tan desesperada que no me di cuenta de la hora, al no encontrar nada llegue al local no se como, pero llegue, mi madre, Diego y otros amigos me preguntaban pero no tenía respuestas, solo quería verlo, solo quería saber dónde estaba…

De pronto sentí que me caía cuando desperté ya estaba en casa, mi madre estaba sentada luego me pregunto: ¿Qué me había pasado? no pude darle respuestas solo llore desconsoladamente…

De pronto las cosas se habían convertido en un desastre la madre de Diego estaba molesta, aunque Diego decía que no, yo sabía que si…

Salí nuevamente a buscarlo y me repetí muchas veces…

-“Lo abre soñado, imagine su rostro… tus recuerdos viven en mi corazón, la canción que nos encantaba escucharla y tu sonrisa al tomar mi mano no lo he olvidado siempre rezo, rezo y pido volver a ver tu sonrisa una vez más… una vez más, se habrá cumplido mi deseo, tal vez lo imagine, estaría soñando, quizá; Adrián ¿Dónde estás ahora? ¿Dime dónde estás?”…

Camine y camine sin tener una pista, mi corazón estaba desecho como aquella vez sin pensarlo llegue a un pequeño parque ya estaba oscuro, me senté cuando alce la mirada Diego estaba frente a mí y me dijo que siempre estaría conmigo, le pedí perdón por no poder amarlo, él dijo que no quería alejarse de mí, que siempre estaría para apoyarme y que no se arrepentía, pero yo sabía que no iba a poder olvidarme de mi primer amor…

Ese día mas que cuando entere que Adrián había muerto mi corazón dolía profundamente la herida se había vuelto a abrir.

Después de unos días recibí un mensaje era de una compañera de colegio decía que tenía una sorpresa me preguntaba cuál era y un día feriado mis amigos me invitaron a ir a nuestro antiguo colegio ir a aquel lugar me traía gratos recuerdos e inolvidables sobre todo dolorosos recuerdos.

Cuando llegamos al lugar vimos que no había cambiado nada, por el parlante se escuchaba la voz de Mateo uno de mis amigos y compañeros ellos querían que celebremos el compromiso en ese lugar también estaba decidida para así olvidar y dejar el pasado y bueno nos pusimos los anillos luego nos dirigimos a la sala de radio, fuimos porque escuchamos la voz de Natalie que recientemente había llegado de Francia bueno nos sentamos a celebrar por el compromiso y el regreso de Natalie todo estaba bien cuando pensaron en poner la música y Mariel encontró  “a Melody of tears” me encantaba pero también me recordaba a él, no quise que la pusieran pero no la detuve porque explicarle iba a ser complicado y como un cuento de hadas, un momento mágico se abrió la puerta y nuevamente estaba ahí frente a mí y de los demás, esta vez solo cayeron lagrimas mientras Natalie se sostuvo de su brazo reclamándole porque había tardado no pedí explicaciones por que ella dijo que se llamaba Gabriel su novio y que se conocieron en Francia todos están sorprendidos y no podían decir nada.

Él era idéntico a Adrián solo que era más alegre y amistoso pero yo tenía muchas preguntas todos están incomodos por el parecido Natalie se fue inmediatamente dijo que tenía cosas que hacer y que Gabriel había venido a recogerla…

Otra vez quedaba desecha hoy podía confirmarlo que la persona que había visto anteriormente en la calle no era Adrián.

La estación de la primavera había terminado con la muerte de Adrián había pasado al otoño inmediatamente al invierno y se había congelado pero con la llegada de Gabriel nuevamente el invierno había empezado… ¿Qué debía hacer? ¿Quién era realmente? ¿Será realmente quien dice ser? Llegue a pensar que tal vez paso como en las novelas pero como iba a ser posible…

Supongo que todos tenían las mismas preguntas… Por mi parte tenía un montón de preguntas ya había salido del lugar cuando me di cuenta ya estaba en un taxi y el conductor me preguntaba:

-Señorita ¿A dónde la llevo?

No sabía cómo había salido del colegio pero ya estaba ahí, así que pedí al conductor que me llevara al cementerio, fui a la tumba de mi abuelo me senté junto a él y hable como si él estuviera ahí, le hable del ocurrido.

-Le pregunte: ¿Qué debía hacer? ¿Cómo iba a enfrentarlo?, no encontraba respuesta…

La vida también me lo arrebato ahora estaba sola aunque todavía tenía a mi madre pero la relación no era buena me senté junto a la tumba y de tanto llorar me quede dormida cuando desperté ya estaba oscuro salí y volví a mi cuarto solo quería que me tragara la tierra para no sentir que estaba muriendo.

Después del incidente del colegio, iba de camino a entregar un trabajo cuando llegue a la oficina de mi nuevo jefe me di con la sorpresa que era Gabriel el novio de Natalie… cuando me vio solo dijo:

¡¡¡Eres tú!!! la amiga de Natalie y luego sonrió…

No podía evitar verlo y ver su parecido a Adrián, cuando el volteo la mirada asía a mí, baje la mirada y no pude retener mis lágrimas y me puse a llorar no podía detenerme, me disculpe y salí inmediatamente sentía que moría, sentía como si el corazón dejaba de latir, sentía que la respiración se me detenía estaba destrozada.

Tome un taxi me dirigí a la casa de Natalie cuando llegue me abrió su puerta y me invito a tomar café para hablar tranquilas pero yo me encontraba impaciente… Ella se sentó y me pregunto

¿¿Dime, qué situación te trae por aquí??

No pude aguantar más y con lágrimas en los ojos empecé con preguntas:

¿Cómo conociste a Gabriel? ¿En qué lugar? ¿es cierto de que creció en Francia? ¿Estás segura de que no es Adrián? Natalie dímelo por favor, quiero saberlo, necesito saberlo…

Natalie estaba incomoda y me respondió:

¿Por qué?… porque amabas a Adrián por eso crees que debo darte explicación y decirte quien es el…

-Gabriel no tiene nada que ver con Adrián, tú sabes que él está muerto, mi novio no sabe quién es Adrián y no me gustaría que pensara que me gusta solo porque se le parece.

Tomé un respiro y le dije: tienes razón en lo que dijiste, Adrián está muerto yo sé que está muerto me voy, discúlpame…

La muerte y la reaparición de personas similares pero diferentes me estaba matando era como ver a una persona resucitada, al pensar sentía que me volvía loca esa noche camine bajo la oscuridad acompañada de la luna preguntándome en cuál era la mejor solución si talvez la mejor solución sería desaparecer o evitar, aunque sabía que evitar no era conveniente ya que él era mi jefe  y aun evitándolo en algún momento me iba a encontrar nuevamente.

En fin Adrián era mi único amor así terminaría no podría tomar otra decisión aunque Gabriel tenga la misma cara nunca podría ser Adrián, él fue el motivo de mi sonrisa, mi alegría era la luz que me iluminaba cuando él se fue todo se convirtió en una oscuridad si me veían sonreír solo era aparentado desde que el desapareció yo ya no era la misma y este fue el final de mi primer amor mi temporada de cerezo.

Las cosas pudieron ser mejor pero las cosas pasan por algo talvez fue el hilo del destino, una cosa tengo bien claro que por mil veces que desee que Adrián vuelva nunca lo hará pero siempre estará en mi corazón y que siempre lo amare.