¿Qué sucedería si un día Mara, al despertarse al mediodía o a la tarde y habiéndose calentado el primer café y prendido el cigarrillo, se detuviera de súbito en el centro de su habitación y se dijera en lo más íntimo: «Hoy podría estallar»? La abuela estaría abajo barriendo y ordenando y, por supuesto, no...
Escritura breve que abarca un grupo de reflexiones de manera independientes y esencial, como para leer sobre puntos de vista que cualquier personaje de una historia sencilla de la vida puede llegar a expresar en un momento dado.
Las visitas a las amigas de la abuela Teresa eran un ritual inquebrantable. A pesar de las ocupaciones diarias, siempre había tiempo para compartir pan amasado, conversar sobre mermeladas y caminar entre los paltos. En una de esas visitas, una pequeña descubrió la importancia de los momentos cotidianos, pero también enfrentó un inesperado susto. Un...
A esa hora indeterminada en que todo parece confabular para una confidencia, la soledad perfecta entre mi tía abuela Violeta y yo dio pie a que pueda enterarme de una de ellas: Me contó que siendo joven pero estando ya casada venía a visitarla un médico cercano a la familia. Al principio no se daba...
En esa casita cuyo misterio me ha sido revelado al fin, mi abuela ahuyenta a los demonios con sus maldiciones y palabrotas, se hace entender con un palo contundente, repliega las canas con un vanidoso tinte, ausculta el porvenir de los suyos en sabias hojas de coca, degrada al dinero con el trueque, verifica el...
Muy buenas lectores, entiendo que este año el certamen literario haya preferido enfocar el tema del concurso en el humor porque en los malos tiempos lo que necesita la gente es sentir felicidad y alegría. Pero como cualquier escritor sabe, cuando alguien se pone delante del papel no se escribe desde la mente sino desde...
«Nunca te mueras» le había pedido. «No moriré», me aseguró. Y entonces ese día fue suficiente. Aquel día no necesité de nada más. Testigos fueron la almohada con esa cóncava grieta donde había aplastado su último sueño, el espejo en su armario que retrató inverso nuestro abrazo infinito, la bata enfermiza que le rodaba sobre...
… Fueron las palabras de mamá mientras sostenía el teléfono contra su oreja y recibía, con lágrimas en los ojos y la cara colorada, las instrucciones del sanatorio, que le indicaban los pasos a seguir a partir de ahora. Me levanté de la cama y simplemente me quedé mirando al infinito, como si no pudiera comprender...