A esta gatita aún le quedan muchas vidas por vivir a tu lado; sola no pienso ir a ninguna parte. ¡Me gustaría tanto podértelo decir! Olvida los pitidos de los monitores asépticos. No me rindo, todo irá bien. Ignórales si te dicen que no saldré adelante. Lee para mí, como haces siempre; aunque no lo creas, te estoy escuchando. También puedes poner a Sabina, que es otro gato con siete vidas, y sabes que me encanta. O cuéntame cuál será nuestro próximo viaje cuando salga de aquí. ¿Por qué me cubrís la cara con una sábana? No entiendo nada.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS