La cereza sobre el pastel

(conversación real con mi amigo Jhamil)

Mi amigo Jhamil de la ciudad de Cochabamba – Bolivia, aún es un estudiante universitario, pero también trabajaba como mensajero para ayudar a su madre enferma del corazón, rechazó ofertas académicas y laborales para cuidarla en otras ciudades para cuidarla; su padre se encontraba trabajando en la ciudad de Cobija y su hermano mayor en la ciudad de Santa Cruz. 

En octubre de 2019 cuando estallaron los conflictos armados en el país, su madre falleció a causa de un ataque cardíaco, por la situación no todos los familiares y amigos pudieron asistir al funeral; pero su padre y hermano regresaron para pasar juntos la crisis violenta que atravesaba el país; en ese periodo realmente comprendieron el valor de la unidad y familia por encima del dinero o desenvolvimiento laboral. En diciembre se reabrió la universidad y también pudo volver a trabajar. 

En enero de 2020 las fuertes lluvias azotaron la ciudad aledaña de Tiquipaya, el desborde de los ríos destruyó varias viviendas en la provincia, una de las afectadas fue su mejor amiga Susana, quien planeaba irse pronto al extranjero para continuar sus estudios de posgrado, por la tragedia, ella adelantó sus planes, el 02 de febrero la acompañó al aeropuerto, ella partía rumbo a Andalucía, hasta el día de hoy no tiene noticias de Susana.

El 06 de marzo 2020 cuando por fin el semestre estaba finalizando, solo faltaba los exámenes finales, pero el 12 de marzo se declaró la cuarentena por el covid-19, se suspendieron todas las actividades educativas presenciales, dos semanas después con la cuarentena total, perdió su trabajo.

Él pero no reniega de su suerte; el tiempo en confinamiento los tres aprendieron a compartir lo pocos ahorros que les quedaban, a recuperar el tiempo perdido volviéndose a conocer, el sufrimiento y el dolor de perder a su madre le permitió recuperó a su padre y hermano, para pasar juntos el resto de la cuarentena. 

Será interesante ver en lo que emprenderán cuando pase la cuarentena.