EL MUNDO EN EL QUE VIVES AHORA

EL MUNDO EN EL QUE VIVES AHORA

Liberación. TereH


Salí a la calle y al poco me percaté que estaba acompañada de muchos más -contaba mi abuela con ojos brillantes y húmedos- aunque no sabía si entonces, y aún ahora, estaba viviendo o soñando.

Vivíamos un mundo de separación que se sostenía de pocos hilos. Cuando llegó la pandemia viral, propagada con intención para unos y sin mayor razón para otros, no parecía demasiado mortal, pero resultó muy agresiva pues el contagio se multiplicó a escalas nunca antes vistas.

Murieron tantos que obligó a una cuarentena mundial, por necesidad de resguardarnos ante el peligro de salir y extender aún más esa locura.

La información no hacía otra cosa que generar más miedo, y en ese confinamiento confronté mis miedos mas profundos, miré la vida cómo  había elegido vivirla: en pie de lucha, esfuerzo, culpa, enojos que se reflejaban en mis relaciones complicadas, y el terrible mundo que percibía.

En ese aislamiento obligado sobrevino el encuentro con mi ser, aquél que no puede ser atacado ni amenazado, me perdoné por la elección que había hecho, y puse fin a mi sueño de conflicto.

Esto debió sucederle a otros, pues aquél día que tras la ventana miré un arcoíris que se dibujaba en el cielo, salí de casa y el aire se sintió ligero. Una suave lluvia refrescó mi cara, mientras mi cuerpo se balanceaba al ritmo de una melodía, en mi mente, que empecé a tararear.

Cuando miré a mi alrededor, éramos muchos los que cantábamos a una sola voz.

Y vimos salir a muchos, más de los que esperábamos todos.

Luego supe que esto fue más viral que el virus.

Y vimos un mundo con sentido, unido en paz y felicidad.

Y éste es el mundo en el que tú vives ahora.

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