Naufragio colectivo

Estoy en un naufragio, estamos en un naufragio en nuestra isla-terraza

buscando la salida. ponemos cartelitos de sos o hacemos hogueras pero el

naufragio es de todos así que nadie puede rescatarnos y suena música y

salimos a aplaudir para aliviarnos pero seguimos flotando a la deriva.

Unos hablan con el gato o con un calcetín otros meditan o escriben y

otros bajan a por hachís. escribo como si rodara cuesta abajo porque es

más sencillo y dicen que el naufragio

continúa hasta mayo o más y yo hablo con el gato y el gato me contesta.

dice que quiere salir al balcón y subirse a la barandilla a observar a

los pájaros y a las gatitas que nunca podrá tener. una vez se tiró del

balcón por amor, una gatita le maullaba de manera sugerente y el muy

imbécil no pudo contener la desesperación y ahí que fue desde un cuarto.

no se mató pero se fracturó dos patas y ahora sigue subiéndose a la

barandilla y tengo que bajarlo constantemente. pobre Fiodor pero no lo

voy a castrar porque me pongo en su lugar y sé que mejor solo a que me

corten las pelotas y porque por lo demás se porta bastante bien. es el

que mejor lleva el naufragio colectivo no se queja duerme come mira una

película conmigo y pone la pata en la pantalla cuando ve a una leona o

una tigresa y contempla muy quieto cuando es un elefante y captura

ratones de luz. se queda tumbado en mi regazo durante horas mientras leo

y él lee mi cara. Después hablo por teléfono y él duerme y ya no sé que

poner pero al menos la angustia se va pasando.