I
En este encierro
La casa se contrae
De tanta soledad
Cruje para combatir
La peste del silencio
En este encierro limpio
Dejo lo roto en su rotura
Porque así debe ser
Demasiado hilo se ha ido ya
En huecos irremediables
Prefiero reconciliarme
Conmigo, con mi casa
Y comenzar a tejer
Sobre otra trama
II
Ahora sí escucho
Con absoluta transparencia
Mi propia soledad
Tan inmensa, tan antigua
Canta con mi voz
El derrumbamiento
Este encierro sirve
Para abrir y nombrar
Sin miedo
El padecimiento
Surcar la noche
Con la libertad de un lobo
Que llega hasta la luna
Para aullar
III
Puedo cantar
La hora precisa
Donde la angustia
Sucede
Es a media noche
Con una copa de vino
A medio terminar
A un costado de la cama
En la plena dispersión
Del silencio
Rompe el llanto
En este encierro
Como una caída
Como un golpe seco
IV
No poder dormir
Por terror a la traición
De las paredes
A que la casa
Se derrumbe sobre mí
En la oscuridad
Su vientre no me refugia
Del miedo, de la desesperación
De estar a solas
Con la mismidad
Mirando mi locura
Desde el espejo
No me protege
Del caos
Que acontece
En mí
Afuera
En todas partes
V
El tiempo se ha dispersado
No sé que día
Que hora de aislamiento
Es la que habito
Las canciones
Ya no pueden
Derrumbar este silencio
Ya no puedo sostener
Otra conversación
Con la tristeza
Porque he usado
Todas las palabras
Para nombrar
La desesperación
VI
Parece lejano
el tiempo de los pájaros
habitando el patio
ahora el olor
a tierra mojada
venida del viento
incita el deseo
de salir a empaparme
de lluvia y libertad
VII
Escribir me está salvando
de la locura
los pensamientos son
en la plenitud del encierro
una boca abierta
una mordedura punzante
de la que puedo morir
si no despierto
VIII
Estoy callando las voces
de mis propios demonios
con vino
el vino es siempre
un indicio de tristeza
Callarlos es superar
el propio infierno
aplastarlos para sobrevivir
el silencio
que crece en las paredes
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