-¿Por qué no puedo pasar la cuarentena contigo?
-Porque te voy a contagiar y no quiero mi vida, es mejor que cada quien esté en su casa.
-¿Pero qué te dijeron los doctores?
-No es nada grave, apenas un resfriado. Pero tampoco es para que me hospitalicen. Sólo debo permanecer en aislamiento.
-Pero quién te va a cuidar
-Mi mamá.
-Pero se puede contagiar.
-Vamos a estar bien. Tú tranquila.
A Yesenia Shantal le disgustaba que Brayton tuviera un lazo irrompible con su misteriosa madre. “Tú no entiendes porque no estás en mi lugar”. Yesenia Shantal reconocía en doña Rubi una peligrosa celopatía freudiana que rayaba en la psicosis. ¿Pero una cuarentena completa sin ver a su cuarentón? Apenas pasaban tiempo juntos. Para Yesenia Shantal eso era una tortura china y prefería un contagio de COVID-19 o enfrentarse a doña Rubí, que estar separada de Brayton. “Debe saber que yo voy a estar con Brayton a pesar de las consecuencias”. Caminó por una ciudad desierta, sin autos, sin taxis; sin gente, ni perros. Un mutismo pandémico asolaba la enorme jungla de asfalto minado y concreto cuarteado. Al llegar al departamento tocó muy fuerte marcó al teléfono y escuchó el tono a través de ese silencio sepulcral de los condominios. Escuchó murmullos. “Doña Rubí, abra, vengo a ver a Brayton, su hijo, soy su novia. Voy a ayudarla a cuidarlo mientras está enfermo”. Oyó pasos y la puerta se abrió.
– ¿Quién eres hija de la chingada? – Doña Rubí salió enfurecida y semidesnuda, cubriendo apenas su enorme cuerpo primigenio y matriarcal, como una venus adiposa, una diosa prehistórica de la fertilidad, colérica y descomunal, que despertaba tras un sueño mítico. Una potencia irrefrenable de la naturaleza que mostraba sus dientes predadores a la pobre y disminuida Yesenia Shantal.
-Vengo a ver a Brayton, soy su novia… n-no tenía el gusto de conocerla…
-De qué carajos estás hablando. Brayton es mi esposo. ¡Brayton, hijo de tu puta madre, quién es esta niña! Otra vez…¡Te lo advertí infeliz rabo verde…!
Brayton se arrojó desnudo del quinto piso y murió descalabrado. En los noticieros se confirmó que era otro deceso a causa del coronavirus.
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