Perritos
Nunca había visto que el cuero pudiera correrse así. No había tanta sangre, pero lo que me llamaba la atención eran los músculos y cómo le brillaba la grasa, su mirada dolorida, esa respiración agitada. No entendí de qué era esa inyección que le pusieron; pensé que le iba a ayudar. Cuando abrieron el baúl,...