EL FALLO DE LA TELOMERASA. INMORTALIDAD ¿SÍ O NO? (SALUD)

30 de Junio de 2050

Mañana tendrá lugar en Ginebra la primera jornada de reunión extraordinaria que la OMS y la ONU han convocado para decidir por fin el futuro de la telomerasa comercial . 

A la reunión asistirán cientos de expertos en medicina, bioética y antropología, para resolver el dilema del aprovechamiento de esta enzima tan útil como controvertida.

Sabemos que la telomerasa asociada a inhibidores puede curar enfermedades como el cáncer, el SIDA o la hepatitis, pero lo que no estaba claro era si esta enzima presente en los telómeros de los cromosomas permitía el mantenimiento e incluso la regeneración celular. Ver a personalidades con alto poder adquisitivo y famosos de toda índole aparentar cuarenta años siendo octogenarios es una buena prueba que lo confirma. Reinterpretar la telomerasa como el elixir de la juventud eterna ha ocasionado que el precio suba y el acceso a ella sea limitado.

La reunión, en opinión de muchos, llega con retraso. Al grito de “Todos somos Martha”, se recuerda en las calles a la joven sudafricana Martha Bajrami que se inmoló ante su webcam porque no podía costearse el caro tratamiento para su cáncer terminal. Las manifestaciones, la quema de fábricas en Bolivia y Tailandia, las amenazas a miembros de las farmacéuticas… Incidentes que en cinco años, según dicen, se han acallado por un polémico interés privado.

La revolución de las clases bajas lleva tiempo fraguándose por las numerosas crisis económicas y sociales que venimos experimentando desde principios de milenio. La sustitución del petróleo , la mecanización de la mano de obra , la crisis del transporte debido a la automatización …

El bioético Lester Truman asegura que “el problema es que la telomerasa está acentuando la ya de por sí notable diferencia entre las clases sociales”, y añade “la humuanidad está ante una evolución mucho más radical de lo que lo fueron la revolución industrial o el renacimiento, debido al irrefrenable avance de la tecnología del último siglo. El ser humano siempre ha perseguido la inmortalidad, pero ahora que la tenemos tal vez ha llegado el momento de preguntarse qué debemos hacer con ella”.