apocalípsis.

¿Que canción
debería componer la lluvia
esta noche?;
está llena de fantasmas
y puedo contemplar
mi decadencia
en los charcos
de sus pasos.
Puede sonar demente
el modo
en el que temo las estrellas
y el cielo las quema
como aviones de papel
que no pudieron despegar
de los cráteres
de la Luna;
siempre fueron mi dios
y mi templo
y ahora no puedo evitar
estremecerme ante
la palidez de sus
rincones.
¿Dónde está su hogar?,
¿dónde mi lugar?
En el corazón yacen
los planetas desiertos
y las ramas que pretendo
enredar en cada anillo,
en la mirada todos los mares
en los que ahogar
la impaciencia,
lo incierto y lo triste
y todos los sentimientos
oscuros y llenos de luz
que no llevan nombre.
¿Dónde está mi lugar
para no volver a estar bajo cajas
en calles que consideré
mi hogar
durante los inviernos?
El cielo está en llamas
y la lluvia no puede apagar
a cada fantasma,
a cada recuerdo,
a cada galaxia rota
si yo soy una.