Solamente muero los domingos.

Un domingo lloré, 

varios domingos lloré.

Precisamente

Ayer, domingo, lloré.

A veces pasa. 

Hoy desperté,

Preparé el mate

Y en esta quietud forzada,

Cada sorbo me llevaba a una pregunta,

que llevaba a otra pregunta,

Que llevaba a…

A otra cosa, me dije. 

Puse lindas melodías, de esas que te trasladan a otra dimensión.

Almorcé con mamá y miramos una peli.

-Hace mucho tiempo no compartíamos una-

Abracé a mis perros, me llenaron de pelos y amor.

Tomé una ducha, dejé caer el agua sobre mi nuca.

Me llegó un mensaje de amigos

Confesamos que nos extrañamos, mucho

e hicimos una videollamada.

Reímos y nos pusimos al día.

Volví a preparar el mate.

Mamá soltó al aire «Hoy tenes mejor cara»

Quise responderle, pero un silencio y una mueca sonrisa bastaron.

Y ante tanta belleza minúscula en un mismo día pensé

Que mal hechas estamos las personas

Que a veces el presente se nos escapa de las manos.

Pero no es con las manos con lo que se agarra el presente, claro.

Sino con este nuevo mate, 

Con el sonido de la risa de mis amigos

Y el sentirse acá, ahora.