Muerte y renacimiento
Infraleve. La gota de agua, tras ese chirrido insoportable, se separó finalmente de sus hermanas y cayó. Moriría sí, pero también crearía minúsculas gotitas.
1184participaciones
Admisión de originales: del 7 de diciembre de 2022 al 23 de marzo de 2023 (la fecha de entrega se ha ampliado)
Periodo de votaciones: del 24 de marzo al 23 de abril de 2023
Fallo del Jurado: el 19 de mayo de 2023
Infraleve. La gota de agua, tras ese chirrido insoportable, se separó finalmente de sus hermanas y cayó. Moriría sí, pero también crearía minúsculas gotitas.
Soy el relevo de fin de semana en la terminal de ómnibus, me toca acompañar a los pasajeros hacia los taxis para que no se suban a un automóvil con tulipa pero sin permisos. Para que no los timen, que se entienda. A veces los viajeros son buena gente, se les nota, aún cuando algo de asombro,...
Día tras día la monotonía se impone, los mismos que haceres, la misma rutina, todo parece confabular para terminar en un día sin sentido, entonces oigo un maullido, así es, son mis michitos; como de costumbre me aproximo a ellos, los sujeto en mis manos «son tan suaves» pienso, para luego colmarlos de besos… ¿besos? eso...
El débil chasquido de una grapadora sin grapas que se gatilla en vacío
Tu esencia me persigue tu perfume me delata cada vez que veo tu mirada asomarse en mi horizonte, me veo destinado a besarte, eres mi diosa partícula creadora del todo, ya que el todo lo componen tus besos, besos, que con tu aroma pacta el silencio y la tortura de no tenerte cerca de mí,...
INFRALEVE: La sensación de ponerse un sombrero ajeno por primera vez.
Infraleve: El silencio ensordecedor de tan solo estar con uno mismo.
El frío de aquella noche se colaba sin vergüenza por cada poro, venciendo sin esfuerzo la resistencia de la «armadura» que vestía el hombre que caminaba solitario por la a pedazos asfaltada calle. Sus pasos acortaban la distancia y su boca soñaba el café que imaginaba oloroso sobre el fuego de la rústica estufa de...
El verano se había instalado. La María, sofocada, se levantó de la siesta, discutiendo con los grillos, que parecían formar una macabra orquesta. Menos mal que amainó ese ventarrón con olor a bicho hediondo, mezclado con peperina y piedras calientes. Algunos chingolos volaron bien bajito por el patio. El ramito de romero colgado en la...
¡Qué extraña es esta casa en agosto! Voy de una habitación a otra sin encontrarme con nadie, y no puedo decir que esté poblada por fantasmas. Las camas siempre hechas, el poco desorden que creo y corrijo yo mismo, para facilitar una calma que se quiere rutina . Cuando vuelvo de la calle no hay...