Mi filosofía de vida

Si no fuera por la tristeza nunca conoceríamos la felicidad, sin miedo nunca habríamos aprendido a ser valientes. Es compleja la vida y confuso su día a día, intentamos hacer lo correcto en ella pero ¿Qué es lo correcto? ¿Cómo podemos aplicar nuestra propia voluntad sin ser egoístas? No podemos, pues en cada voluntad hay rayos de egoísmo por querer ayudar y ser ayudados.

Puede ser entonces que lo correcto nunca sea lo adecuado debido al nacimiento de esa intención o el fin del mismo. Si quiero hacer el bien ¿soy culpable de querer implantar mi propia voluntad? ¿O es verdad que sigo una línea de bondad reconocida por la sociedad?

Quiero lo mejor para todo el mundo pero resulta que todo el mundo es diferente y que no puedo hacer feliz a todo el mundo tal y como dice un dicho “nunca lloverá a gusto de todo el mundo”. Qué culpa tengo yo de querer que todo sea mejor, de imaginarme un mundo sin corrupción de querer que todo el mundo viva sin complicación y que nuestro día a día sea realmente una bendición, sin gente que haga maldad, pues para ellos la vida también les sonreirá y nadie pasará nunca necesidad, ni pobreza, ni hambruna, ni tristeza, ni soledad y no habrá porque hacer maldad.

Hay gente que dice que querer un mundo mejor es egoísta y creen que por trabajar más o por ser un empleado muy bien pagado o por tener una empresa muy destacada tienen mayor derecho que los demás. Se equivocan, todos absolutamente todos, tenemos el mismo derecho a respirar, a comer, a querer, a vivir. Si, puede que tengas más dinero que otros que tu trabajo o tu dedicación al mismo, sea mayor que el de los demás y por ello tengas que cobrar acorde a tu responsabilidad, pero ¿desde cuando giramos la cara cuando un igual lo está pasando mal? ¿Desde cuándo nuestra sociedad se ha vuelto tan demencial? ¿Desde cuándo querer lo mejor para todos se convirtió en secundario?

La gente buena es desacreditada y no queremos ayudar por miedo a ser traicionados por miedo a que por ser buenos te tomen como a un tonto.

Yo… no pienso que esté tonto, soy buena persona y ayudaré a todo aquel que me necesita o que pida mi ayuda, pues mi único fin es un mundo donde la sociedad se apoye mutuamente, donde no hay gente en la calle, un mundo donde no hay ladrones porque todos tenemos las mismas oportunidades para poder avanzar, para poder sentir, para poder vivir una vida plena.

Si realmente pensáis que por querer un mundo mejor las buenas personas somos tontos, lo seré con orgullo pues amo mi bondad y sobre todo adoro ser altruista. Animo a todo el mundo a serlo y animo a que sean dichosos gracias a ayudar a los demás pues siempre habrá alguien dispuesto a luchar.

Si quieres un mundo mejor, ayuda a los demás a tener una vida mejor pues para ellos su vida es su mundo. Da ejemplo, haz lo correcto. Esta es mi filosofía de vida, mi día a día, mi ser, mi personalidad. Así soy de verdad.