Todo viaje te hace crecer, mi viaje ha sido hacia el mismo centro de mis miedos, de mis mayores defectos y los cuales uno a uno voy a superar, en este viaje he superado el más grande y oscuro que siempre ha peleado contra mí para arrinconar me: mi inseguridad…
Inseguridad para todo, para tomar cualquier decisión, inseguridad para disfrutar, inseguridad para vivir.
He peleado y lo he logrado, me he mirado desde fuera y me he dicho: viajo a ese lugar para poner fin a mi adormecimiento, a mi letargo y por fin vivo.
No fue fácil, pero he de reconocer que más fácil de lo que pensaba, simplemente me dediqué a caminar, a asimilar lo que venía y hacerle frente, a decirme una y mil veces, lo voy a conseguir, no digo que esté curada, pues creo que es un fantasma fuerte que puede venir en cualquier momento, pero ahora sé cómo hacerle frente, estoy más segura y decido, tomo decisiones, me arriesgo y esa sensación de libertad me dará fuerza para enfrentarme de nuevo si vuelve.
Mi segundo viaje lo haré hacia otro miedo que es el amor, pero de ese viaje ya hablaremos…de este he vuelto muy fuerte y con una sonrisa y una maleta vacía de inseguridades y llena de satisfacción.
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