El silencio que dice todo.

El silencio que dice todo.

Despertar una mañana y encontrarme con una difícil realidad, no es una simple mochila por llevar…

En el diario local de mi ciudad, han destinado un pequeño articulo que hace referencia a «Los travestis pelean por una jubilación», que título tan mísero y que contenido tan potencial que lleva en sí mismo. Tratando de resolver socialmente si es correcto, que las personas que deciden en su vida vestirse como más le gusta, merecen tener dignidad económica a la hora de su acabose profesional.

En esta sociedad del siglo XXI nos decimos de mente abierta, inclusión, participativa en marchas de diversidad y muchos bellos términos más, donde solo quedan en hermosas palabras pero son muy poco aplicadas. Algunas vez se preguntaron ¿ los travestis se sienten identificados con los anuncios laborales? ¿ en una consultora están aptos para recibir travestis y realizar un proceso laboral no cargado de estigmatizaciones? ¿un ente estatal tiene travestis laborando para su servicio? La corta respuesta a todos estos interrogantes es NO.

Es una norma escrita, sin ser mencionada, que todos automáticamente hemos aprendido a leer, y acatar sin poner resistencia alguna. Las personas que son travestis (poco me agrada encasillar a las personas…son humanos con derechos) acatan en forma silenciosa su destino, ya que los centros de estudios no se encuentran preparados para dictar clases a un niño que decide vestir contra la regla impuesta de género, o no estamos preparados mentalmente para aceptar recibir los servicios de una persona que rompe con prejuicios, a la hora de elegir su atuendo y del mismo modo un empleador, no tiene en mente que en su cargo vacante puede presentarse un transexual, travesti, etc.

Las masas sutilmente los denigran, excluyendolos de posibilidades de estudios, de oportunidades laborales, de concursos gubernamentales, entre otras opciones. Actualmente están estudiando una reglamentación donde los Organismos Públicos deben tener un porcentaje de empleados travestis!!! siiii, has leído bien, como si fueran un bicho raro, donde hay que tener una cierta templanza y contratarlos! Pues bien, esa no es la solución.

Si todos fuéramos capaces de abrir nuestros prejuicios, donde el condicionamiento, no marcará nuestra rutina, podríamos encontrar los avisos laborales diarios y sentirnos incluidos en ellos, sin incursionar en los por menores de la vida privada de cada persona. Un cargo de secretaria, puede ser eficazmente desempeñado por una chica trans., o cualquier otro, donde las capacidades pueden ser desarrolladas con normalidad.

Este articulo sería muy adecuado que pueda llegar a la conciencia de los empleadores, donde no se les va arruinar su reputación, si contratan a las personas capaces de desarrollar las actividades requeridas, sin condiciones extras. Todos merecemos una oportunidad, a todos nos gusto que nos la brinden..

Basta de hipocresías! vivamos libres de prejuicios, en la actualidad hay muchas personas que desean ser quien no pueden ser, por mantener una imagen….pero en el momento de morir, no hay imagen que salvaguardar, solo tenemos una vida, vamos a vivirla. Y si podemos ayudar a que otras personas puedan vivirla plenamente sin cargar sin cargar nuestros estereotipos, ya es un gran aporte!

Se imaginaron cómo puede sentirse una persona que desea trabajar, desarrollar sus habilidades y ganarse el dinero para poder comer y vivir dignamente y no poder, porque la sociedad lo tiene excluido por decidir vivir conforme a sus patrones de vida.

Por favor, abramos mentes, nuestra empresa puede ser igual de exitosa si brindamos oportunidades iguales a todas las personas….

Fin

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