¿Por qué?

¿Por qué nadie me avisó? Nadie me contó que la vida pasa tan deprisa sin pensar. En un suspiro te encuentras siendo adulto, sin manual de instrucciones… ¿Y ahora qué hago? ¿Cómo construyo una vida? Ya no es época de salir corriendo a casa y llorar a tu madre porque has tenido un mal día en el cole, se acabó el juego y empieza el mundo real.

¡¡¡¡El mundo real!!!! Que miedo o ilusión o presión o… No lo sé, ¡solo sé que no se nada! Este mundo me queda grande, está lleno de incógnitas sin resolver… ¡¡Qué incertidumbre!!

Pongamos los pies sobre la tierra, respiremos hondo y al lío, será fácil.

Un poco de paciencia, unas pinceladas de creatividad, concentración y si hace falta gritaremos ayuda. ¿Ayuda? ¡oh no! Los adultos no piden ayuda, son autosuficientes, se valen por sí mismos sea como sea; y

ahora… ¿Qué hago? No se jugar a este juego. ¿Y si me equivoco? ¿Cuál es la decisión correcta, A o B? ¿Por qué esto es tan difícil?

¡¡¡NECESITO UN MANUAL!!!