Hoy me he levantado contento, porque hoy he tomado la «gran decisión», voy a dejar mi trabajo, ya no puedo más, quiero vivir.
Sentado frente a mi ventana, con mi primer café en la mano,me pregunto:¿Es una decisión importante?- Lo es. ¿Depende mi futuro de ella?.- Económicamente si. Todas estas preguntas me llevan a reflexionar sobre todas las decisiones que he tomado en la vida, y en las que todos tomamos. Estamos tomando decisiones continuamente: ir a pié, ir en coche, en bús, en metro, ¿Que comer hoy? ¿Que excusa darle a nuestro jefe?. De todas las decisiones que tomamos cada segundo de nuestra vida, ¿De cuales depende nuestro futuro? No lo sabemos.
Me imagino millones de universos paralelos, viviendo las millones de decisiones por las que no optamos, viviendo otras vidas que no elegimos. De ser así ¿Habrá muchos «nosotros» en otras circunstancias haciendo cosas inimaginables? ¿Tendremos otras vidas paralelas, reflejos de nosotros mismos, paletas de colores con otras realidades?. Puede ser, pero como no lo sabemos, no nos arriesgamos, ¿O quizás si?, ¿Es el libre albedrío nuestra razón de existir?. Y si nos arriesgamos ¿nos responsabilizamos de las de las decisiones que tomamos?.-A lo hecho pecho- dice un buen amigo mio, pero a veces nos preguntamos,¿que pasaría si…? y es entonces cuando nos gustaría abrir el portal del tiempo y el espacio, y através de un agujerito ver esos otros universos paralelos, ese desdoblamiento de nosotros mismos, de nuestro cuerpo, de nuestra alma, y poder dislumbrar en que punto me encuentro y hasta donde he llegado por esta u otra decisión, que errores he cometido y si viviendo esta vida, la que tengo ahora, he acertado.
Este es el momento en que me encuentro frente a frente con la vida, viendo que solo tengo una, y que soy parte de las circunstancias y de las decisiones que he tomado. Ya está todo pensado, no voy a darle mas vueltas, lo tengo claro, mañana me voy de la empresa, dejo mi trabajo, quiero vivir y no estar bajo el yugo del tiempo y del espacio. Soy consciente de mi decisión, asumo las consecuencias. Mañana ya se encargará la vida , el destino o lo que sea de decirme si he acertado. De momento sólo me voy a concentrar en este hermoso viaje, el de emprender una nueva vida, sin ataduras, sin horarios. y con tiempo para mi y mis reflexiones en solitario.
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