Danzando en alas del sutil encanto y aleteo insignificante
bailando al vaivén de alado sueño
nada es tan grave como dejar de imaginar,
ni tan enorme como compartir un sueño…
Deja que las horas nos alcancen,
que el aliento nos haga suspirar.
Permite a la vida su alegría
dale voz a los seres diminutos que no conoces.
Somos el polvo de aquellas estrellas que miras,
ellas jamás se dispersan en la oscuridad
terso el tacto de un vuelo,
no permitas que el momento lo estruje,
jamás entres de golpe en la realidad.
Matizamos los vientos de aromas dulces,
acrecentamos los nublados horizontes,
todo en un instante, ese donde estás…
Nunca olvides el momento,
jamás el instante es vano, es tuyo y nuestro
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