Recuerdo como si fuese hoy nuestras vacaciones en la playa, las caminatas por la rambla, mis patines y te recuerdo a vos querido Abuelo Miguel todos los dias. Siempre estas presente en mis pensamientos, en cada anecdota, con tu risa, tus enseñanzas, con tu ejemplo, con tus ganas de vivir y de ser feliz junto tus nietos.

Y como olvidarte! si cada vez que juega Boca alli estas, parece que aun te veo sentado en tu platea, asiento 95, bajo ese techo que te salvo de lluvias, de frios, porque estuviste siempre, siempre alentando a tu equipo favorito desde hace 104 años.

Fue en tu infancia que te hicieron socio, los tablones aun de madera te vieron crecer, hacerte hombre, te sostuvieron.

Alli viviste los mejores años de glorias, de campeonatos. Es que fuiste el Socio 1 del Club hasta el año 2013 y nunca faltaste a la cita con tu Boquita. Recuerdo que una noche hasta te escapaste de un casamiento en traje y tomaste el colectivo, como ibas a estar ausente….si eras el numero 1.

Viste a tantos jugadores pasar por el club de tus amores, gritaste tantos goles y seguramente habras sufrido tambien con alguna derrota. Pero aun asi eras feliz, estabas en tu templo, como alguna vez dijiste: Boca era tu motor.

Hoy quiero plasmar con este relato el amor infinito que tengo por vos, y aunque ya hace 7 años que partiste, estas aqui, siempre.

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