El secreto del pan

Era el año de 1712, época de la esclavitud. Yo era un pequeño niño que trabajaba para mis señores, ya que desde el día en que nací nunca fui libre, mamá cuidaba de mí con todo su amor y ternura, a pesar de haber recibido los tratos más crueles e indignantes.

Mamá me enseñó a ser un gran hombre, pues papá antes de que naciera fue azotado hasta morir, por ello nunca lo llegué a conocer. Contaba mamá que papá trabaja duro para traernos comida, pero hubo una época de sequía y todo lo cultivado se perdió, a causa de eso tras una noche de haber robado pan para su esposa que estaba embarazada ocurrió tal tragedia que lo dejó sin vida, en donde murió también la panadera por haber permitido que tome el pan de sus señores.

Desde entonces mamá cuidaba de mí, ella era una hermosa mujer negra, con sus bellos ojos cafés, y su cabello rizado, mamá se encargaba de servir a sus amos, pues ella era la esclava personal encargada de la cocina en especial del pan, fue considerada así, por sus manos esplendorosas que hacía el pan más suave y delicioso que se haya probado.

Su secreto decía que se encontraba en el amor que le ponía para hacerlos, porque gracias a ello encontraba la forma de ver sonreír a su único hijo.