EL ÚLTIMO PAN DE MI PADRE
Mi padre me dejo un pan para que me lo comiera cuando estuviera triste. El problema, es que con la tristeza se pierde el apetito. Inclusive si lo comiera sin hambre, ¿Que me quedaría hacer cuando de nuevo me entristeciera?, no tendría el mismo efecto si yo mismo llenara la panera. Mi padre ya no...