>>Supe que te conocería. Los datos que tenía sobre ti eran escasos e inciertos, ya que las personas que te vivían no eran del todo claras… algunos, te describían como el inicio de la muerte, otros, como el final de una vida, y para muchos, eres sinónimo de la enfermedad… — Tú tampoco me conoces aún, pero sé que me has estado esperando pacientemente desde que nací… Cuando vi que te acercabas, me propuse llegar a ti con elocuencia, gracia y gratitud… dejare que tiñas mis hebras de blanco, e ilumines mi mirada con el dolor de mis huesos, pero, sobre todo, te dejare esbozar en mí, la sonrisa virtuosa que acompaña una buena vida… <<
>>Escuché por ahí, que mientras hay vida, hay esperanza… quizá sea cierto. ¿Tú qué opinas? <<
—Opino, lo que una vez mi abue me dijo… ¡Mija!, hay que saber vivir. Me lo dijo y en mi ignorante juventud no supe cómo interpretarlo… La recuerdo con admiración, un caso de éxito dentro de mi familia a decir verdad y aunque sé que no se mucho sobre ella, lo que ella me trasmitió durante cada conversación, se sembró en mi como la semilla que germina en un pequeño bote de compota y se vuelve paso a paso en un frondoso árbol de frutas, flores y espinas, que rompe los cristales que le limitan.—
>> ¿Espinas?… <<
— Si, si… espinas… — Espinas dulces pero punzantes, que salen de cada herida no curada… no te creas, hacerse viejo es un privilegio que pocos logran contar, y a los que se quejan, pues a esos, te digo, debes alejar… Hoy en día ya voy entendiendo a la abuela… —
>> ¿De verdad? ¿A qué se refería entonces?… <<
— Si te lo explico, te estaré quitando la oportunidad de que puedas descubrirlo como lo hice yo… así que… —
>> Entiendo… bueno ya cada día estas más cerca… la verdad ansío saber cómo será la vida contigo. ¿Sabes? te mentí, la verdad es que cuando tenía escasos 20 años dude de conocerte… no sé, no pensé que llegaría a ese momento… <<
—Lo sé… recuerda que también tuve tu edad… —
>> ¿Tú también lo creías? <<
—Un poco si… para mi la certeza sobre el futuro es una ilusión… creer que sabemos realmente QUE, COMO y CUANDO, pasaran las cosas es un engaño de la adolescencia… jiji. Disculpa que me ría, no es ofensa. Pero la verdad es que lo que sé ahora no se compara en absoluto a lo que imaginaba cuando tenía tu edad… ¡Ya te darás cuenta! Y ¡Ojo!… sé que cuando nos encontremos, habrás descubierto cosas nuevas que yo no, así que, ten paciencia. —
>> bueno, la verdad me considero bastante paciente… solo que hay momentos que no me siento del todo segura, ¿sabes?… ¿me quieres contar que más te decía la abuela? <<
—sí, lo sé, y porque ahora lo sé, es que con la certeza del adolescente te digo, tan solo ten paciencia… — Bueno, de la abuela lo poco más que pude averiguar después de su partida fue que tuvo una vida bien compleja… así como el árbol de espinas, flores y frutas… pero con espinas menos dulces que las mía (ríe entre dientes) —
>>¿Quieres decir que la abuela no era tan dulce como pareces tu? <<
—No, lo que quiero decir es que la abuela no tuvo la suerte que has tenido tu… — pero ¿sabes que si tenía la abuela?… —Compasión, resiliencia y sabiduría… esta última casi natural —La abuela nació en un pueblito muy pequeño hacia las afueras de la ciudad… se podría decir que medio creció, en el campo. ¡De ahí tuvo que irse a otro sitio junto a una de sus hermanas, sin embargo ese sitio solo estaba plagado de espinas agrias y amargas! así que tuvo que huir con tan solo 12 años bien lejos de ese jardín de hiedra donde había llegado siendo tan solo una niña… — Así anduvo, vagando y trabajando todo lo que pudo hasta llegar a un jardín menos hostil, que prometía tierra fértil para crecer y cosechar… La abuela nació con uno de los atributos más valiosos del mundo… ¡En mi opinión claro esta!… —
>> Si, ¿cuál?… <<
— La determinación… la abuela era visionaria… y la visión más la determinación, se convierten en la semilla más frondosa y prospera que puedas llegar a sembrar alguna vez… Abue, sabía desde muy joven, aun con escasos recursos y educación, lo que quería para su vida… y eso la llevo a bregar fuertemente a lo largo de su vida hasta alcanzar a florecer con frutas y flores, mellando las espinas… — ¡No creas, no fue un camino nada sencillo! ¡no puedes confundir la historia de la abuela creyendo que solo se trató de desear, manifestar y ya está! … noooo, ella tuvo que luchar, batallar, arar en la tierra muy profundo para sembrar esos cimientos… y la verdad, estoy segura no debió ser nada fácil… — Si, claro que para mí ella es un ejemplo de manifestación espiritual, que, contra todo pronóstico y recursos, alcanzó niveles elevadísimos de comprensión de su entorno y del cómo debía hacer las cosas para llegar a su objetivo… ¿Qué si lo hizo bien? ¿Qué si se equivocó?… pues no lo sé… no estamos acá para juzgarle… posiblemente si cometió errores, ¿por qué no?, pues que también era humana, ¡era real… no es un cuento! —
— ¿Qué aprecio yo?… pues el resultado y el aprendizaje que alcanzó con todo lo que vivió y cómo, a su manera, nos lo hizo llegar a cada una, de generación en generación… increíble la verdad… analfabeta, iletrada, pero con una mente brillante, resolutiva y decidida… de naturaleza independiente… jamás esperó que alguien hiciese algo por ella, ella misma se las amañaba para resolver lo que le tocase… de verdad que era admirable… bueno, por lo menos para mí lo fue… —Te cuento algo más, abue era de origen mestizo, y la mamá de abue sufrió mucho durante toda su vida… al punto de perder algunos tornillos, lo que hizo que abue tuviese la responsabilidad de protegerla siendo tan solo una adolescente… en nuestro linaje tenemos ¡de todo! Locura, pasión, amor, miedos, tormentas y desenfreno… dependerá de nosotras cual de todos estos alimentaremos más, ¿no crees? — Yo elegí desde muy pronto enfocarme en el amor, la pasión, mitigar los miedos y apaciguar las tormentas, ¡veo que tú has tomado el mismo camino!
Tengo una amiga psicóloga que recién he visto y me ha preguntado que es lo que admiro de la abuela y que me gustaría decirle para despedirme…:
“Abue, GRACIAS! Gracias por permitirme estar en tu historia, gracias por decidir parir a mi madre y haber hecho por ella lo que solo una madre de carne y hueso haría… gracias por sembrar en mí el espíritu de la fortaleza, por abrirme la puerta hacia lo espiritual y gracias por mostrarme el camino de la resiliencia… Abue te admiro por tus resultados, por haber conseguido unirte al hombre que diseñaste para ti, te admiro por haber tejido el camino del dolor con hilos tan fuertes que terminaron siendo la red de tu alegría… te admiro por mostrarnos tus huellas de perseverancia y estar por encima de quien te señalo, con tu paso lento pero firme, nos enseñaste que si queremos algo, debemos ir tras ello… debemos saber confiar, pero sobre todo SABER VIVIR!
Admiro la forma en como a través del sacrificio que solo las madres podrían hacer por sus hijos, sellaste el camino de tus tres rubias… fueron tal como las imaginaste, ¿verdad?, como las pequeñas alemanas a quienes por años tuviste que cuidar para alimentar tu frágil cuerpo, pero que te sirvió de aliciente para mantener tu espíritu firme y construir tu destino…
¡Te admiro y te agradezco por haber conseguido para nosotros (tus nietos) un futuro menos espinoso, lleno de flores y frutas… semejante al campo que siempre soñaste SER!
Wow!! Que hermosa carta, yo no habría podido escribirla mejor… de verdad que abue si que supo trazar la línea de la vida de una forma mucho mas alegre… es realmente impresionante como después de todo lo que le toco vivir, una la veía sonreír a carcajadas con los cuentos e historias que le decíamos sobre nuestras vidas… si que dentro de todo supo finalmente como vivir desde el amor y la satisfacción… la verdad ahora que recuerdo, se que fue bástate estricta en nuestra infancia, pero jamás la escuche quejarse ¡por nada!
De hecho, era impresionante como ella de cualquier acontecimiento siempre tenía la posibilidad de sembrar el beneficio de la duda hacia el otro… en ocasiones era medio frustrante, pero sí que supo cómo enseñarnos el valor de la empatía… y todo esto, sin ella siquiera saber su verdadero significado…
Me habría gusto mostrarle mis logros sobre estos temas, que ella sin estudiarlos los dominaba muy bien, imagínate si le hubiese podido enseñar algo de lo que se ha descubierto en estos tiempos acerca de la empatía e inteligencia emocional, y ni hablar sobre el mindfulness… Wow habría sido emblemático…
—¡Oh! Claro que sí, habría sido estupendo haberle mostrado que sus teorías sobre el buen vivir no estaban haladas por los pelos ni eran utopías… pero ¿sabes?… creo que ella intuyó el camino que tomamos… y creo que no habrá mejor homenaje a su alma que el continuar replicando en nuestras vidas lo que hubo valioso en la de ella… abue no llego a los 95 años de gratis… abue supo cuándo y cómo morir… tan determinada fue, que hasta logro irse libre de sufrimiento y dolor, y, además, entrego su alma para rescatar la de otro… —
>> ¿Te refieres a nuestro padre? <<
—… si, me refiero a él… ambos estaban en el cruce de la línea de la vida y comenzaban a transitar la muerte, pero algo lo detuvo, y sé que fue ella quien le otorgo una nueva posibilidad de luchar… sabemos que solo dios decide, pero soy fiel creyente que cuando alguien decide sacrificarse, él lo retribuye otorgando gracia. Y mi papa recibió la gracia de dios a través de un chance más… esperemos la sepa aprovechar tanto como la abue lo supo hacer… —
>> ¿De verdad crees eso?… <<
—Entiendo que te cueste verlo… la verdad a tu edad también me mantenía más escéptica… pero ahora después de lo que he visto, vivido y escuchado… si, si lo creo… creo en la divinidad, en los milagros y en lo que está por encima de lo tangible, que traspasa nuestro entendimiento… el misticismo está en todo lo que nosotros decidamos interpretar como surreal —Descuida… no tienes por qué creerme… cuando llegues donde mí, me dirás que te ha parecido todo lo que te he contado.
>> ¿Hay algo mas que quieras decirme mientras llego hasta ti?… <<
— Me gustaría decirte que además de paciencia, es importante tener confianza… confianza en ti y en lo que el universo puede ofrecerte, si decides creer en el como fuente inagotable de virtudes… también te diré que cada una de tus acciones tendrán un resultado en tu destino, y no es el destino quien determina tus acciones. Así que, si quieres un futuro virtuoso, debes edificarlo. —
—¡Oh! Casi lo olvido… ¿Hay algo que tú quieras preguntarme?
fue así como la juventud se acercó a la vejez y comenzaron a recorrer su camino tomadas de la mano, ya que la una sin la otra ninguna existiría…
OPINIONES Y COMENTARIOS