Me vi obligada a estar escribiendo de él, tal vez porque no sé si es demasiado tarde para olvidar o para seguir recordando. Según Freud: «Mientras más se quiere olvidar mas se recuerda». Yo creo que eso, eso me estaba ocurriendo.
Me dijeron que nunca podría olvidar a alguien que me había dado tanto para recordar y aquí estoy. Con un medio café sin tomar y con dudas de las cuales nunca podre sacar. Ahí les va la historia, espero no arruinarles el final.
Éramos jóvenes, tal vez éramos muy distintos pero a la vez muy iguales. Opuestos complementarios, se los llaman. Me daba paz pero a la vez me daba guerra. Me daba sueños y a la vez me daba un insomnio del cual no podría sacar fácilmente.
Nos conocimos en una noche de fiesta, tal vez algo muy inusual e inconcluso. Porqué nunca nos habíamos visto antes, pero sentíamos que nos conocíamos de hace mucho. Nos llamamos la atención el uno al otro, y rápidamente entablamos una conversación que luego terminaría en un beso muy furtivo. Que dejaría huellas que permanecerían durante unos cuatro años.
Luego de esos besos que parecían no acabar llego la hora de despedirse, lo que antes nos costaba ahora nos resultaría muy facil.Entonces nos despedimos, como dos desconocidos aunque en el fondo pareciera como que nos conocíamos muy bien. Después llego a casa, y rápidamente recibo un mensaje diciendo: ‘¡Soy yo!, me encanto nuestro beso’. Rápidamente agarro el celular y sonrió de manera patética pero a la vez confortante. Sin embargo,había algo que no había notado, eran las personas. Mucha gente no quería nuestra presencia o union.Como esa frase que dice «felicidad de dos, envidia de miles”, bueno algo así.
En un principio, parecía que éramos una hermosa casualidad, Porque lugar donde estaba, el aparecía. Y parecíamos un imán, porque nos atraía lo que sentíamos,No nos importaba lo que pasaba alrededor, era como si el mundo se estaba prendiendo fuego y nosotros amábamos quemarnos. Muy sadomasoquista de nuestra parte. Pero debo confesar que así es el ser humano. Un ser racional, irónico y sádico.Porque es el primero que busca contención en el mismo lugar donde le dieron dolor.También,le da todo a alguien que no merecía ni la mitad, mientras que el que merecía todo no le da nada. Así de irónicos somos.
En fin ,ese año pasamos momentos juntos. Yo diría que demasiados. Porque teníamos la puta costumbre de buscarnos sin saber que nos habíamos encontrado. Lugares de aquí a allá, siempre invadidos por su presencia.Bueno,por nuestra presencia. Hasta que dentro de unos meses todo se revierte. Como el castillo de la princesa. Él príncipe se fue y la princesa se quedo sola en la torre, velando por su llegada.Igualmente,todo había cambiado y decidimos alejarnos.
Luego de un lapso de dos años, cada uno ya con su vida, con nuevas personas incluidas en la misma, volvimos a vernos se los juro, que el soltó simplemente esta frase:-«estuve buscandote,ni te imaginaras todo lo que hice».Sonrio,como si me pareciera broma todo lo que estaba ocurriendo. Es más, jamás pensaría que después de tanto tiempo, el fuego seguía ardiendo junto con las cenizas, que pareciera que eran parte de la historia. Volvimos a charlar, de nosotros ,de lo que fuimos, de lo que no. Prácticamente de la vida misma. Yo siempre me preguntaba :-¿Por qué vuelve?¿Acaso será un capitulo que hay que poner punto final o suspensivo?.Había leído por ahi,que a veces volvían por el simple hecho de que te extraña, Que como vos, no encontró a otra, que lo haga sentir igual. Pero tambien,lei que decía que volvía porque sabía, que era fácil regresar. Tenía en mi cabeza miles de preguntas para él y para mí. Ya que era raro, que había pasado tanto tiempo y la llama seguía prendida.
Entonces seguimos hablando, en plan de nada. Simplemente para recordar o para sacarnos esas «cosas pendientes» que nos dejamos. Pero me di cuenta que mientras más confianza le daba ,mas mierda me hacía a mi misma. Como si me hubiera olvidado de mi.Me olvide de lo que valia,de lo que era. De mi persona.Se ve que estaba ciega, no sé si de amor pero lo estaba. Porque las inseguridades que me generaron fueron fuertes, Hoy creo que el hombre que hace sentir insegura a una mujer, es él, el inseguro y el, él que tiene miedo. El que esconde detrás de una figura segura de sí misma, una persona narcisista. Que cree que puede con todo y tiene un caparazón donde esconde todo aquello que distorsiona esa figura «social» que creo.
Por una parte,y de a poco me fui alejando. Era muy imposible hacerlo, bueno eso creia.Hasta que decidí borrarlo, de todos lados.Fotos,contactos e incluso de canciones pero ¿Cómo hago para borrarlo del corazón?.Fue muy dificil,porque no solo fue el hecho de olvidarlo sino tambien,el hecho de empezar a recordarme a mí. Cuanto me había olvidado de mi persona, todo lo que había dejado pasar ,simplemente para que no se vaya. Pero ya no más.
No obstante, esto lo sabía yo, porque no a mucha gente se lo contaba. Era yo y mi propia lucha. La mayoría de mi entorno pensaba que estaba todo bien y que era todo un cuento.Si,un cuento de nunca acabar. Él me decía:»Dicen que nada es eterno, lo voy a implementar el día que deje de pensarte».Entonces ya habría sido muy tarde…
Me aleje, me aleje de él, de sus incertidumbres, de sus virtudes e incluso de sus defectos, Porque no hay mejor acto de amor a uno/una misma, el hecho de irse de ese lugar que te hace daño. Irse y no volver, esa es una verdadera demostración de querernosPorque debemos levantarnos de la mesa, cuando ya no se sirve amor. Porque debemos ponernos a nosotros/as primero y luego lo que venga.
Desde entonces ,cada uno tomó su camino, uno fue por la derecha y el otro por la izquierda. Pero fuimos tan estúpidos que nos olvidamos que el mundo era redondo. Y de todos modos el destino nos volvería a cruzar. Tal vez ya más grandes, con más experiencias y con menos sentimientos. De hecho creo que uno no es frio por falta de ellos. Sino que lo es, por exceso de decepciones o exceso de tanta historia que jamás concluyó. Ninguno volvió a saber de ambos, por mas relaciones de amistades que teníamos,que compartimos.Nos volvimos el recuerdo inconcluso del uno y del otro. Yo pensé que era lo mejor. Que dejemos las cosas asi,como estan.Porque no veía esa lógica de que él esté detrás mío.Porque ni yo era tan superior a él y ni él era tan inferior a mí. En esa época,decidí tener paz mental para mi, solamente para mi, Y así fue. No volví a saber de él hasta hace poco, hasta dos años después.Que el apareció,nuevamente.Como esa maldita casualidad de la que hablaba desde un principio. Es más sostengo que el amor es como cuando haces una fiesta en tu casa.»Vienen ,te desordenan la casa y luego estas sola, sola tratando de ordenar ese maldito desorden «.Supe de él por un amigo en común,el cual seguía nuestra «tonta novela» como un lector aficionado por la misma. Y ahí ,volvimos a vernos. Ya los dos grandes, con cambios no solo estéticos sino también mentales. Pero lo que en él no había cambiado era el profundo amor inseguro que me tenía. Como dije, él era una persona muy insegura, que se escondía detrás de esa carcasa de seductor y seguro, pero en el fondo no era más que un pequeño niño ingenuo que jugaba a un rol que no le pertenecía.Volvimos hablar de todo. Y a la vez de nada. Sólo que él soltó simplemente una frase :-«no sé qué me pasa, pero me mirás, me sonreís y se va al carajo todo”, ¿Se imaginaran el desenlace de esa tarde no?. Y así por un lapso de meses, que nos juntábamos,nos desordenamos las mentes y los cuerpos. Después todo volvía a la normalidad, como si nada hubiera pasado. Y aquí otra vez, volvemos a la teoría de «La fiesta en casa”. Buscaba el hecho de desnudarme y no hablo de quitarme la ropa.Sino,de decir lo que pasaba pero era como estar pidiéndole piedad al verdugo. Muy poco coherente de mi parte. Y repito definitivamente somos seres totalmente irónicos.Yo me estaba desenvolviendo con aquel hombre que había hecho de mí, a una mujer muy insegura de si misma. Pero una parte de mi decía «creo que todos nos merecemos empezar de nuevo, y no quedarnos siempre con el rencor “pero otra parte decía:»no te olvides lo que hizo y lo que paso”. Entonces cómo puedo vivir con esas dos bivalencias. Por ende, decidí dejar ese pasado atrás darle una oportunidad. Pero siendo «amigos”, una amistad que no duraría mucho. Porque él no la entendía y yo pretendía mucho de la misma. Una vez que se instaló esa imitación falsa de amistad,cada vez las ganas acumuladas eran más notables. Pero los conceptos de amistad estaban muy dispersos, tanto que el los confundía con «amor”, o incluso llegaba a celarme con otros hombres. Por eso mismo, un día decidí que ya basta. Yo había puesto lo mejor, por eso me sentía decepcionada.Porque sentí que le di una oportunidad, a alguien que ya no merecía nada. Luego volvió así unas sucesivas veces. Yo no estaba segura de mí, porque en cierto punto juntos la pasábamos bien y a la vez la pasábamos mal. Era como estar buscando un ángel en un infierno. Pero a la vez me gustaba jugar con ese fuego. Ya que se decía que si no jugaba con fuego, me iba a morir de frío. Pero a la vez, me seguía olvidando de mí, y mi inseguridad. Que por cierto era y sigo siendo una profesional en ocultarlas. Aparecen cuando estoy sola, frente a un espejo.
Y así fue como concluyó. Porque esta vez, dejé de seguir escribiendo puntos suspensivos, y decidí poner un punto final.Decidí,dejar atrás al pasado, ya que si de nuevo llama, no tiene nada nuevo que contarme. Porque olvidó fuiste y olvido serás,porque primero estoy yo y luego lo que vendrá.Por eso, bendita sea esa gota que colmó el vaso, y me hizo saber que ya deje ese capítulo. Es más que no saltee esa página, ya directamente debía arrancarla y desde donde había quedado volver a escribir una nueva. Volver a empezar de cero, con nuevas personas. Y si vamos a cometer nuevos errores, que sean nuevos y no los que podríamos haber evitado.
Si algun dia escuchas mi nombre,tal vez te traigan recuerdos, de lo que fuimos y de lo que no. A lo que llegamos y a lo que partimos. De lo vivido y de lo olvidado.Quizás cuando lo escuches ya no seré la misma. Porque me convertí en aquella mujer que trataste de derribar algún día.Cuando lo sientas ya será tarde, porque de aquella niña insegura que creaste. Solo queda una mujer segura de sí misma. Vestida de rebeldía,tatuada de libertad y maquillada de seguridad…
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