Ella es Tere

Teresa Baeza Bedolla, nació en Moroleón Guanajuato en 1946, la conocí hace casi 19 años, desde que llegue al mundo.

«Tere» fueron de mis primeras palabras, me enseño mas de la mitad de lo que hoy conozco sobre este mundo, sobre las personas, sobre todo, recuerdos con ella tengo miles, pero lo que mas estará presente en mi vida, será su sazón, y su esencia.

Ella es divertida, canta y baila con nosotras cualquier genero, incluso los modernos, adoro ver películas con ella, aunque no pare de hacer comentarios chuscos sobre los personajes, también se queda dormida a mitad de las películas, ya es costumbre, pero igual sigue siendo la mejor compañía, me gusta recostarme en sus piernas o recargarme en su hombro, es extraño pero solo con ella soy así, solo a ella le cuento todos mis secretos y problemas, siempre me ha dado los mejores consejos, es directa y realista, y se preocupa tanto por mi, lo puedo sentir, su amor para conmigo y mis hermanos, es inmenso.

A pesar de que tuvo una vida realmente difícil, parece que no, porque nada ni nadie ha logrado arrebatarle esa alegría contagiosa. Y, ¿Por qué digo vida difícil, acaso no es así para todos ?

Pues verán, de pequeña su madre trabajaba todo el día y toda la noche se la pasaba limpiando casas, pues padre, no tenia, y si tenia, no lo conocía, mientras ella siendo una de las mayores, tenia que hacer la comida, si, a los 8 años, comenzó a cocinar por obligación, y bueno, no hablemos de cuando se le quemaba el arroz o se le salaba la sopa, ya sabia que cuando su madre llegara, recibiría una golpiza, porque tenían cantidades muy escatimadas de comida al día, y no podían remplazar sus errores con comida nueva, así que se la comerían tal y como le quedara, también se quemaba muchas veces, aun tiene manchas que variadas quemaduras le dejaron desde entonces.

También iba a la escuela primaria, pero incluso se inscribía sola o con ayuda de vecinas, llevaba zapatos a veces rotos, y de mochila, un cinturón amarrado a sus libros o cuadernos prestados, si, aprendía a hacer todo casi siempre sola, y para poder ver una película en casa de una vecina que tenia televisión que en ese entonces era prestigioso, cobraba, y para ganar dinero ella y otros niños del vecindario pedían ayudar a cargar el mandado, o tirar basuras y así cuando fuese suficiente, poder pagar para ver una película, eso era su diversión, al igual que jugar a la casita, a la comidita, a las canicas, y uno de los que mas recuerdo que me conto, fue cuando iba al arroyo cerca del pequeño rancho de sus abuelos, iba a jugar con una prima y otras niñas, entonces tenían que hacer parejas, pero decían; ¡No con Teresa yo no quiero, no yo tampoco! y ella solo les decía: ¡ancabo que no quería jugar!, pero un día se molesto tanto que lanzo a su prima cerca del arroyo donde había estiércol, y comenzó a burlarse de ella, mientras todas espantadas de su acción, aceptaron jugar con ella sin siquiera pedírselos, pero ella orgullosamente ya no quiso.

Esa es una anécdota de las miles que nos ha contado, pero esa es de las favoritas, otra es la de «la torta» cuando mi abuela iba en quinto año de primaria, nunca llevaba lunch, entonces la maestra había dejado su rica torta en su escritorio y Tere no dudo en tomarla, en cuanto la maestra se despisto, ella ya tenia la torta debajo de sus piernas bien escondida, y cuando la maestra volvió comenzó a buscar su torta y pregunto a sus alumnos, y todos comenzaron a señalar a Tere y decir : ¡»fue Teresa maestra, ella fue, ella se la robo»! entonces sin avergonzarse acompaño a la maestra a la dirección, pero al notar que su intención no era mas que alimentarse, la perdonaron con la condición de que no volviera a hacerlo, y al contarnos esto, añadió la canción ; «mexicanos ladrones sin vergüenza, me robaron mi torta de a 50», y mis hermanos y yo comenzamos a usarla en cualquier caso parecido.

 Hay otra que nombramos la del » dedo» Tere ya era joven unos 15 años, en su pueblo a esa edad ya eran casaderas, y un muchacho la pretendía, entonces la invito a tomar un helado, y todo iba bien, hasta que él la abrazo intentando bajar su mano poco a poco, entonces Tere indignada y molesta le tomo el dedo índice y se lo doblo lo mas que pudo, diciéndole que nunca mas se le volviera a acercar, y el joven asustado diciéndole que estaba loca, se fue y nunca mas lo volvió a ver, pues bueno desde entonces Tere nos aconseja darnos a respetar siempre, y no aceptar ni si quiera un abrazo así, porque los hombres son mañosos, y mas hoy en día, esto me recuerda a la canción que ella nos cantaba: «Marieta no seas coqueta porque los hombres son muy malos, prometen muchos regalos y lo que dan son puros palos». 

Si en lo personal me preguntan cual de todos sus cuentos es mi favorito, es el de «Espiri» un pretendiente al que quiso demasiado, sin embargo no pudo ser, pues verán, Vivian en el mismo pueblo y comenzaron a pretenderse, le compraba un kilo de helado cada vez que salían, le regalaba anillos y collares bañados en oro, no eran tan rico, pero si tenia recursos, muchos mas que ella, y enserio la quería para ser la madre de sus hijos, y Teresa igual, sin embargo Espiri quería que se fueran a casar a la ciudad donde el trabajaba, y ahí vivir, pero Teresa apenas tenia 16 años y no se sentía lista para tener una vida de adulto, entonces cuando Espiri iba a buscarla para casarse, Teresa le decía que necesitaba el permiso de su mama y ella no volvería en meses, así que tenia que esperar, pero su madre nunca llego, y aunque solo era un pretexto, y Espiri se canso de esperar, Tere se mudo a la ciudad con toda su familia, y como si el destino no estuviera al favor de Espiri, el volvió a Moroleón, años después unos 10 quizás, Tere volvió a su pueblo de paseo, ella ya tenia tres hijos, y encontró a Espiri en una plaza de haya muy concurrida, y el destino cruzo sus miradas de lejos, pero Espiri solo la miro y agacho la cabeza, intentando esconderse pero fue tarde, Tere orgullosa dijo: ¡Así me gusta, que se agachen cuando me miren! pues había escuchado que el ya tenia familia, y eso fue todo, quizás era el correcto, pero no fue el tiempo. De ahí se enlaza la canción de «Speedy González» que suena como Espiri González, va algo así: Ya veo venir a Speedy González, cómo un pequeño ciclón, ha tomado muchos tragos, porqué Rosita lo dejó, él nunca le teme a nada, pero está vez sí lloró, es la muchacha qué le gusta, la dueña de su corazón… 

Bueno una mas de mil historias de Tere que algún día les contare, mientras ya hay que avanzar con esto, les decía que ya tenia tres hijos, de Domingo su exesposo quien falleció de alcoholismo, ya saben por problemas en la infancia, sus hijos apenas lo recuerdan pues siempre andaba en la calle tomando, y así dejo a Teresa viuda y con tres hijos, hasta que años después conoció a José mejor amigo de su hermano menor Luis, quien diría que ese joven 10 años menor que ella seria mi abuelo, si, tuvieron dos hijas, mi madre Yislen y mi tía Mitzi, entonces creo en la frase: «para el amor no hay edad», aunque la madre de José no la quería para su hijo, eso fue al principio, pero antes de morir cuando José estaba teniendo problemas con el alcohol, su madre le agradeció a Tere por cuidarlo tanto, y soportarlo, dijo que era una gran mujer, siguieron sus vidas, con sus dos hijas, pues los otros tres hijos de Domingo ya eran grandes, y tomaron sus caminos.

Es cuando me doy cuenta de todo lo que tengo y lo que tenia a su edad, los juegos de antes, las personas de antes, sus comportamientos, gustos, por eso dicen que todo era mas puro, y Tere al escuchar canciones actuales se paraliza por el tipo de letras groseras, a eso me refiero, los bailes de antes a los «bailes» de hoy como ese al que llaman perreo, me avergüenzo muchas veces de mi generación y las futuras, las costumbres, se que todo cambia, todos tienen sus pros y contras, solo es aprender a vivir en el aquí y ahora.

 Hoy en día Tere esta internada en un hospital, los primeros días, creí que moriría con ella, ni siquiera creía lo que nos estaba pasando, mi madre lloraba desconsoladamente a cada segundo, mis tías, José, todos la necesitamos, incluso pensé en suicidarme si ella se iba de este mundo, pero no se preocupen es normal en mi pensarlo y no hacerlo, gracias a Dios comenzó a mejorar, a necesitar menos oxigeno artificial, su saturación aumentaba cada día, si, le dio covid-19, a Tere, a José y mi tía Mitzi, ellos igual estuvieron internados, pero salieron y hoy están mucho mejor, solo estamos esperando a Tere, hoy su reporte medico no fue bueno, pues hace días nos comentaban los doctores que estaba ansiosa, estresada, que ya no quería estar ahí, dicen que a veces dice cosas incoherentes, y que hoy se arranco el catéter, el medio por el que le pasan los medicamentos, ¿pero yo que puedo hacer?, solo me inclino y comienzo a sollozar sin parar, pidiéndole a el Dios del universo piedad, misericordia, y ayuda, para que Tere salga pronto, para que nos de una oportunidad mas a mi familia y a mi de verla, abrazarla, cuidarla como merecía, cosa que quizás no hacíamos bien, pues es cierto, nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde, o en mi caso hasta que sabes que puedes perderlo, y muchos no vemos eso, que cada día es un gran milagro, ahora solo estoy agradecida porque los médicos dicen que Tere es un caso INUSUAL, que no ah sido entubada y ah mejorado, a pesar de su edad, y no me sorprende, pues tengo Fe y se que el de arriba nos escucha, a pesar de ser tan ingratos, y no soy nadie para juzgar pero tres de sus hijos no la ven hace tiempo, antes de que enfermara, era como si la ignoraran cada quien viviendo su vida, y de vez en cuando la llamaban, pero a pesar de eso, Tere los ama tanto, que ignoraba sus errores o sus acciones hirientes para con ella, y cuando enfermo y mi mama y mi tía hablaron con sus hermanastros, entonces nos llego el arrepentimiento.

Tere es fuerte, es valiente, una gran mujer, con sus errores y todo, pero es una gran madre, es mas que solo mi abuela, y no le digo abuela, porque nunca le gusto que le dijeran así, pues la hace sentir vieja, entonces a mis hermanos a mi, y a mis primos nos enseño a decirle TERE, y lo mismo con José, dice que el es muy joven para que le digan abuelo, así que le decimos Toño, y vaya que de viejos solo las canas tienen, ellos son mi otra mitad, son mi inspiración, son mi familia, son mis padres postizos, son mis maestros de vida.

Y bueno Tere Te Amo como no imaginas, quédate 50 años mas, no te preocupes que pronto saldrás de ese hospital, y te estaremos esperando en casa con mucho amor, y yo te tengo una sorpresa, pero quédate que te quiero a mi lado hasta morir, sígueme instruyendo, sígueme queriendo, sígueme dando esos grandes y sabios consejos, sígueme contando una y mil veces mas todas tus historias, sigue cocinando tan delicioso, cantemos con Juan Gabriel, bailemos con Camilo Cesto, y como dice Enrique Guzmán «tu novio»; sígueme dando felicidad.