Los Hijos del Virus, todos esos niños estaban ocultos bajo 30 metros de profundidad, en esa zona oscura  a veces húmeda y otras muy calurosa, ellos se habían adaptado a esa vida.  Nacidos bajo tierra  podían ver con poca luz y hasta correr entre los túneles de lo que alguna vez fue una mina artesanal. Se alimentaban de lo que pudieran   recolectar o atrapar, sus padres ya no estaban o se habían marchado o muerto,  ahora estaban solos contra el mundo y los virus que azotaban a la faz  de la tierra. Los días eran todos iguales ya que bajo tierra es así, no se podía determinar qué hora era ni que dia, solo cuando salía el sol por la mañana, los rayos acariciaban levemente la entrada principal al zanjón, a esa hora los niños se amontonaban en la piedra mayor, que era su límite para subir, desde donde sus ojitos veían por unos segundos , el color de la luz del sol. Era demasiado peligroso salir a la superficie , nunca lo habían hecho , pero cada vez que un adulto salió a buscar ayuda , o comida , jamás regresaba. Las historias que habían oído de los mayores antes de que perecieran , eran aterradoras, sobre grupos de personas desesperadas que contagiadas , erraban por las ciudades esperando caer al piso abatidos por la fiebre y las convulsiones. Los niños de Underland, soñaban con imágenes sobre lo que sería una vida fuera de las cuevas de la mina abandonada, no conocían el mar, las playas , los ríos, las plazas , los árboles , el verano o invierno, todo para ellos era idéntico todos los días. Sus frágiles cuerpos desnutridos resistian milagrosamente la escasez y la falta de todo, prácticamente , su adaptación al medio hostil era casi divina. 

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