La luna no tiene importancia.

Advertencia: Esta historia no es fácil de comprender, por ello, al final se encuentra la explicación.

Desastrosa resultó la vida de esta joven, tan joven. Todo fue imposible desde el momento en que sus sueños desaparecieron, cuando el sol se convirtió en un recuerdo. Al anochecer la luna no alumbraba sus sueños, sino el acto más denigrante que haya recaído sobre una pobre muchacha de veinte años.

Cómo sufría cuando los hombres perseguían sus muslos con la mirada, se sentía observada de más y, de la misma manera, que nadie la miraba como si fuese una persona. Siempre, al caer la noche; le pedían que llorara, que rogara por una comida más, por sufrir todavía más. Ella había intentado seguir sus sueños, pero no la dejaron, la condenaron, la exiliaron. Llora antes del amanecer y cuando reina la oscuridad no puede. “Furcia” se repetía a ella misma, sabiendo que jamás volvería a formar parte del día. Y yo, simplemente, la vi caminar por la calle.

Explicación: No está mal escrito, es así. Habla de la violación del derecho a trabajar. Cosa que me parece que está completamente en contexto, porque al tocar la problemática y los miedos, las emociones, el problema y no sólo el tema principal, el texto se vuelve único. En mi opinión, escuchar su crítica sólo hará de mi estilo algo completamente inexistente.