Su voz me caló, fue como un subidón de aire frio por los pies, el bello de mi cuerpo se erizó cuando pronunció mi nombre…

Creí en todo momento que lo estaba haciendo mal, Ben, siempre me trató de forma diferente.

Mi narrativa no tenía nada que ver con lo que explicó , nos decía que pareceríamos patrones todos iguales pero le demostré en todo momento que soy la clave para hacer cambiar y mejorar cualquier cosa que toque.

A golpe de «k» entendió con mis palabras escritas que no soy cualquiera.

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