La felicidad al alcance del volante
Victoria se disponía a empacar las cosas en la maleta azul llena de pegatinas de todos aquellos países en los que había estado. Se paró por un instante a observarlas cuando el sonido de unas patitas rascando la puerta desvió su atención. Era Trufa. Victoria la miró y sonrió. Hacia tres meses que su anterior...