Juntos, rumbo a la tristeza
Llegaba tarde. Muy tarde. ¿Cómo iba a soportar un viaje de 6 horas con una persona tan egocéntrica como para hacer esperar a un completo desconocido? ¿Qué se habría pensado? Yo no era su familia, no la amaba incondicionalmente, no tenía que aceptar sus defectos a cambio de sus virtudes. No, yo no era nadie....