Mi pasion "la Hosteleria"

Nací como quien dice,detrás de una barra,en un bar pequeño dentro del mercado de Vallehermoso.

Mi padre,que se quedo huerfano muy joven,tuvo que hacerse cargo del pequeño negocio,junto con su madre,sacaron adelante a mi tio,que era aún más pequeño.

Luego,una vez casado,tuvo que sacar adelante a una gran familia,pues somos seis hermanos varones.

Eran otros tiempos,en todos los sentidos,donde el mercado estaba en auge,y aquello parecía una gran familia,donde todos nos conociamos perfectamente.

Los de la edad de mi padre,tenian mucha complicidad,llegando a hacer fiestas tanto dentro del mercado como en alguna de sus casas.

Los hijos,como nosotros,en principio jugabamos dentro del mercado,cuando cerraban los comercios.

Años más tarde, seguiamos con los negocios ayudando a nuestros padres,bien por no querer estudiar,la mayoria o por fallecimiento del progenitor.

En este bar-bodega,además de vender bebidas de todo tipo,se despachaba hielo para los carniceros,pescaderos o gente de la calle,que solia ir el fin de semana,pues entonces no había camaras frigrificas ni neveras.

En una diminuta cocina,se preparaba a diario un primer plato contundente(las lentejas con chorizo,eran su especialidad)

De segundo plato,solia preparar algun plato elaborado, o como hacian los carniceros o pescaderos,que llevaban alguno de sus productos,para que mi padre se los preparase a su gusto.

No es porque yo lo diga,pero mi padre era un buen cocinero y tenia mucho merito hacer comidas tan ricas en ese cuchitril de cocina.

Mi hermano Ricardo,fue el primero en abandonar sus estudios,cuando termino el bachiller y no querer seguir estudiando,

Un par de años después,fui yo,una vez acabado el B.U.P. no quise seguir con los estudios,y aunque tuve una propuesta de mi padre de irme a Almeria a hacer un curso de hosteleria,le dije que no,pues entonces estaba tonteando con una chavala, que luego además no llegamos a nada,pero era normal,lo de tontear,digo yo.

Años más tarde,llego mi hermano Tony,y mi padre ya nos había dejado a cargo a mi hermano el mayor y a mi el negocio, para irse al bar de la funeraria,cerca del mercado,pero solia ir a ver como iba el negocio y a almorzar al mercado, con un grupo que llamaron «los inapetentes».

A mi,un amigo de mi padre,me propuso irme con él,para la temporada de verano,pero al fallecer su padre,que era el que abría el bar por las mañanas,me propuso seguir con él,asi que me quede hasta que a finales de mayo me tuve que ir forzosamente,para hacer el servicio militar.

Pocos meses antes fue el famoso golpe de estado del 23-F.

Me incorpore al ejercito e hice la instrucción en los paracas,en Alcantarilla(Murcia),era un cuerpo de élite y muy duro,por cierto,pero fui por mi quinta.

Al acabar la instrucción y tener mi correspondiente permiso,al volver de nuevo al mismo destino,me toco seguir con la hosteleria,esta vez como camarero,cocinero o de servicio de habitaciones.

Teniamos que preparar la comida a los oficiales,la cena a los que se quedarán de guardia o los que pernoctaban en la residencia.

Hacer las habitaciones de esos mismos oficiales,que dormian dentro de la residencia,etc

Cuando me licencie,en agosto de 1982,tuve unas pequeñas vacaciones,hasta que en septiembre me hicieron una oferta ,con la que firme mi primer contrato.

Consistia en trabajar de camarero en el ministerio de salud e higiene en el trabajo.

Tenía un buenisimo horario,de 7 de la mañana hasta teminar de comer el personal,sobre las 4 de la tarde.

Los fines de semana los teniamos libres,asi que me podia dedicar a jugar al fútbol en el equipo del mercado,que por cierto llevaba mi padre,siendo presidente y capitán.

Estando allí,me salio una oferta irrechazable,en un restaurante de lujo,como camarero de sala y que nos tocaria inaugurar.

Allí aprendi a elaborar platos delante del cliente,como las tablas de quesos,mondar frutas sin tocarlas para nada o limpiar pescados y lo que mejor se me daba era preparar steak-tartar,que sigo preparandomelo para mi o algún compañero donde trabajo actualmente o en mi propia casa.

Nos toco hacer toda clase de preparativos antes de la inauguración,como limpiar lo que los albañiles iban terminando,ir de compras o acudir a casa de nuestra jefa ,un chalet que tenia en la Moraleja,donde tenia desde vajillas,cuberterias,otros utensilios de hosteleria o algún que otro manjar que tenia dentro de la parcela,como los ricos y deliciosos membrillos.

Para la decoración habían contratado a un gran diseñador,donde le dio un gran toque natural,con plantas de interior,cortinas florales y un ventanal,en redondo ,donde instalo dos sofas enfrentados,que podian juntarse para hacer una mesa en oval preciosa.

Actualmente me encuentro desde hace más de 30 años en un restaurante,que gracias a un pescadero del mercado de Vallehermoso me recomendo.

Yo había estado allí alguna vez de cliente con el equipo de fútbol «Socorrito»,que solian celebrar allí el final de temporada y entrega de trofeos. 

Este restaurante de ambiente familiar,se llama ANANIAS,donde se come muy bien,la cocina es casera y los platos de cuchara, como fabada asturiana,potaje de vigilia en temporada,los garbanzos con langotinos o patatas con variados productos,segun temporada son exquisitos.

Pero también hay buenas carnes y pescados,casqueria(mollejas,sesos,manitas de cordero,carrillada de ternera,etc),pero la verdadera especialidad son los callos a la madrileña,el rabo de toro,sus postres caseros(la crema catalana o el mousse de yogurt).

La bodega muy variada y selecta,con caldos de casi todas las denominaciones de origen,varias añadas e incluso magnums variados(1´5 litros)para grandes bebedores o una mesa grande.

Aquí, lo mejor es que el trato con el publico es de gran complicidad,clientes de diario,clientes de fin de semana y celebraciones familiares,donde procuramos unas veces pasar desapercibidos y otras ser uno más de la celebración.

Tengo un hermano como compañero que lleva 27 años trabajando con nosotros,que curiosamente,junto con otro son los que menos tiempo llevan.

Somos como una pequeña familia,donde nos va bien el compañerismo que existe y es que debe ser así.

Incluso otro de mis hermanos,estubo haciendo una suplencia por una baja de un compañero.

Es una profesión dura,pero toda la vida la he dedicado sin descanso,pues realmente me gusta,al igual que ahora escribir.

SI NO EXISTIERAMOS TENDRIÁN QUE INVENTARNOS.

FIN