Vanidad (veneno)

Vanidad (veneno)

Gael Frias Vejar

17/07/2017

Hija de reyes, orgullo de antepasados y brazadas de oro en mis brazos, en mis venas corre la realeza y la cura de la desgracia, juzgando a los plebeyos hasta lograr que los radiantes destellos de mi voluntad cubran el digno imperio de aquellos fieles que me siguen entre rocas y abismos.

Poseedora del don de la vida, pétalos y robles,nobles y pobladores crecen sin terminar su ciclo de juventud , la gloria y la paz un paraíso que en carne y hueso se vive sin acabar, soy la justicia que la gracia otorga, aclamando la sangre enemiga simbolizando la victoria a mi favor.

Mi espejo es el más grande, con la imagen más real de mi esencia y bella creación, siendo la deidad que explorará los confines del mundo y gobernará hasta el fin del diluvio, a pesar de todo nunca ha existido veneno ni desgracia que acabe con mi admirable ser, inepta envidia que crece en lo más profundo de la discordia de aquellos mortales,nunca podrán igualarme,poseo la eternidad y esa sera la condición que lleve a los infames humanos a ser enjuiciados.

¡Renacimiento, Arte y vida es lo que brindo !. No creo en un destino que guié el transcurso del futuro, pero creo en los actos del mal y el bien que esta presente en la naturaleza humana e imposible por erradicar, se vive en el constante equilibrio ya que la oscuridad es ausencia de la luz, la vida complace a su fin en la muerte, el mal existe y esta presente por igual en cada uno de ellos.

Seré quien se coloque enfrente del batallón siendo el apoyo moral a los guerreros, lanzándome contra bestias y ejércitos hostiles que aun no comprenden lo lo fuerte que nos hemos convertido y como estamos en la sima de la purificación, mi ira desatándose hasta dominar completamente toda mi alma para luchar y derramar la sangre del enemigo, mi corajes hará que salve las vidas a largo lapso de tiempo de los caídos sintiendo las penas y vengando los muertos aliados, recordándolos y luchando en su nombre, somos la nación que pronto el mundo gobernara. ¡Rendirse ante nuestros pies y la piedad sera su salvación!, unirse y un espíritu de paz les otorgare, posteriormente abandonar esa esa alma tan corrompida.

El reino se expande y habla por si mismo, los pintores crean lienzos de mi en los cuales se denota la escultura de mi mi cuerpo marcando colores que dan a conocer el cabello largo y lacio de color rojizo, los ojos tan invaluables de oro que miran lo mas profundo de tu corazón y mis mejillas y rasgo facial totalmente detallado me hace recordar lo que he logrado en esta vida que ha cambiado el curso de la historia. creciendo como la hermandad que somos y reunificando el apoyo de todo y de todos somo invencibles y nada franquear nuestras familias ni mucho menos nuestro hecho a base de esfuerzo y de mi generoso don para el progreso.

No soy Dios, pero si la personificación de uno mismo, mi gran amigo de todos los tiempos,es la muerte y mi mejor alianza por su debido trabajo de llevarse a todos los errantes que pertenecen a otro lugar y al mismo tiempo reclamado a la gente que yo misma he liderado aunque es el precio justo que se tiene que pagar para poder dar vida a otra vida que florecerá y vivirá su corta vida en mis mandatos.


Sin embargo mi vista se torna confusa ante mi soledad, me hace reflexionar un tormento tan profundo llamado tiempo,afilando la cuchilla de la realidad hasta que ataca y derrama mi ego, no pido perdón, soy la sabiduría y la razón, mi historia nunca se rebajará a tal acto de debilidad hasta que el filo del arma conecta con ira a mi reflejo haciéndome ver una ilusión frente mis ojos de oro durante mucho tiempo que niego que esa sea la rotunda realidad ¡Dejar de reprocharme la supuesta verdad! es la gran mentira pero tras de los restos del espejo,la vista se torna a un ser de miseria y lamento, totalmente lo contrario de lo que soy,pero sigo negando la inexistente verdad disfrazada de mentira , este veneno es tan doloroso pero no caeré tan fácil,estoy segura que es la certeza de mi gran vida de hazañas y ellos me torturaran fortuitamente para que suelte mi verdadera naturaleza de orgullo , aun me queda mi vanidad y moriré con ella sea mi último error a mi voluntad.

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