LA MAGIA Y LA TECNOLOGIA

¿Fue primero Dios o la Magia? O tal vez ya eran desde la eternidad infinita. Porque la tecnología si sé que es creación o, más bien, descubrimiento del hombre ¿Pero y el hombre? ¿Es magia o tecnología divina? ¿Y porqué escribo sobre la magia, cuando el temario no parece que tenga que ver con ella? Porque pienso en como es de maravilloso el milagro de la comunicación. Cuando escribo, hablo, utilizo señales o figuras con las manos, entre muchas formas más, me estoy comunicando. Pero antes intervino la magia. En el momento en que el hombre primitivo utilizó el primer medio para comunicarse. Tal vez señaló a lo lejos con un dedo. O un grito avisó de un peligro.

En cualquier caso descubrió la magia de la comunicación. A partir de una acción, de un sonido, se dio cuenta realmente de que no estaba solo. A partir de ahí inventó sonidos y señales para hacerse entender. Ensayaría en la cueva los matices de su voz, se asombraría de oír el eco, miraría a sus vecinos observando su reacción. El eco. La primera señal tecnológica que para ellos sería algo mágico. La segunda utilización de la tecnología serían las señales gráficas en las paredes. La utilización de pinceles y pinturas trazando perfiles de animales y seres humanos. Más magia ante los ojos de la comunidad presente.

La tecnología hoy es tan tremenda que, para muchos de los que la vivimos, no esta muy lejos de la magia. Es cierto que para la comunidad actual la magia queda en lo romántico. Pero no cabe duda que hay que ser muy imaginativo para que los avances tecnológicos se produzcan. Recuerdo cuando inicié mi independencia vital lejos de la casa familiar. La comunicación era a base del correo postal. El teléfono no era un medio tecnológico habitual entre las familias. Se utilizaba para comunicaciones urgentes y previa cita postal. Recuerdo que me desesperaba el hecho de la recepción de las misivas de mi novia. A veces me llegaba la posterior a otra que se había retrasado.

Hoy los jovenes ya tienen acceso a los teléfonos móviles. Esta claro que para ellos no existe nada de magia pero sí una avanzada tecnología. Aunque sin parar mientes en la maravilla tecnológica que manejan. Es más, es tanto lo que desean extraer de ella que se les hacen cortas las prestaciones. Para los sexagenarios significa un esfuerzo intelectual adaptarnos a los avances que surgen día a día. Porque al margen de la utilización profesional de los sistemas de comunicación, no cabe duda de que la masificación impera entre la población corriente y moliente.

Recuerdo aquel messenger que nos unió a todos con mensajes  escritos y  vídeo. Desde entonces hemos ido a más hasta pasar de los sms a los whatsapp. Es un chateo instantáneo si tienes a tu interlocutor en línea. Lo que no he probado es si las abreviaturas que hemos utilizado en los chats son iguales de prácticas, habida cuenta de que la utilización de la escritura por el método swype es verdaderamente mágico. Cavilar en como los técnicos se las imaginan para sus creaciones es, para mí, lo verdaderamente mágico, rayando en lo romántico. Romanticismo y tecnología. Magia y el Dios Tecnológico.

Pero la tecnología a la par que avanza crea nuevas necesidades. Azuza las ansias del saber y crea la necesidad de llegar al no va más. Como el mago que tras una actuación mágica realiza otra más asombrosa. Pero si la magia es el resultado del ingenio, la tecnología es el resultado del genio. Y el vehículo es siempre la comunicación.

La gesticulación es la comunicación entre los sordomudos. Por ese medio “escucha” y “habla”. Un medio no reemplazado por la tecnología. Me explico. En un acto público el gesticulador retransmite el discurso a los sordomudos. Imaginemos que no fuera necesario el interprete, que la voz se convirtiera en gestos y estos aparecieran en la pantalla. O al revés, que los gestos del sordomudo se conviertan en escritura, e incluso en habla. Puede llegar a suceder llevando algún tipo de guantes emisores. Porque la tecnología  además de llegar se adapta. Y es ahí donde el genio y el ingenio se aúnan.

No sé si es posible hablar por whatsapp y que el receptor lo reciba en lenguaje escrito o al revés. Incluso que algún aparato “lea” un libro, pagina a pagina, y la retransmita por audio.  Tal vez los vídeos aparezcan en una página como aparece hoy la escritura, con la voz del escritor e, incluso, su rostro. La mente divaga en busca de lo real y a veces un sueño se convierte, o lo convertimos, en un producto consumible. Los técnicos son como los escritores quienes, sin tener un tema preparado, crean y crean en cuanto se sientan ante un teclado. El técnico prueba mil veces mil ensayos, tan pronto se encuentra en su laboratorio, hasta conseguir su nuevo descubrimiento mágico.

¿Pero cual es la relación de dios y la tecnología? No me cabe duda de que es el hombre ¿Y cual el instrumento? Ello nos lleva de nuevo a Dios, o a la Magia ¿Hay comunicación entre la mente del hombre y Dios en el momento de crear una nueva tecnología? Y cuando escribo Dios me refiero a algo desconocido para mí que gobierna la Magia del Universo. Y es que la tecnología por si misma no es nada. Tiene que se hallada, utilizada.  Ha de cumplir un fin,  una utilidad para el mejor desenvolvimiento del hombre en el mundo. Y es que el ser humano no se conforma en adaptarse a su entorno, como hacen los animales irracionales.. El hombre lucha física e intelectualmente para que el entorno se adapte a él. Hasta donde llegará es otra cuestión. Lo que si tengo seguro es que en lo que respecta a la comunicación, la más provechosa magia de la Humanidad, los que perduren tras nosotros serán testigos de maravillas que, ni aún con la imaginación, puedo vislumbrar.

 LUIS PEREZ LLORET