SHERIDA

Jorge se había separado de sus amigos, en plena noche, en un callejón oscuro y estaba a punto de entrar en un bar que no conocía. Era el típico principio de una historia de miedo con un monstruo esperando al otro lado de la puerta, y en cierta manera había un monstruo al otro lado de la puerta, pero no ese tipo de monstruo, el monstruo que aguardaba a Jorge era muy diferente.

Todo había comenzado una semana antes cuando había entrado en clase con una sonrisa en la cara y presumiendo del mejor polvo de su vida. Nadie le había hecho caso Ían era un bocas y un cuentista y todo el mundo sabia que era igual de virgen que todos en la clase. Todos los chicos ¡claro!

Jorge no había sido una excepción hasta que le había escuchado hablar, como la describía alabándola y enardeciéndola, hasta ponerla al mismo nivel de una diosa. Le había convencido; se había envalentonado, se había hecho con un carnet falso nuevo, se había separado pronto y había buscado el lugar del que Ían había hablado y ahora se encontraba en la puerta a punto de entrar.

Se dirigió a la barra e intento hacerse el duro pidiendo un vaso de wiski y acabo escupiéndolo y tosiendo con la garganta enrojecida. No tuvo que buscarla ella fue a el contoneándose y moviéndose con una elegancia y seguridad absolutas, como una leona ante su presa.

Pidió dos copas y le entrego una a él.

-que te ha traído aquí

-estoy buscando a alguien
-y por que no me la describes quizá la conozca.
Jorge ya sabia que era ella, o al menos lo sospechaba ya que era tal y como la había descrito Ían después de deshacer las exageraciones, claro. Aun así la siguió el juego.
-¿físicamente? … es alta, morena, esbelta y viste increíblemente con esa ropa que nunca pasa de moda y que logra sugerir sin mostrar las esplendidas lineas de su figura.
-¿y que carácter tiene? Pregunto ella con una sonrisita burlona
-¡¡¡es una diosa!!!
-en que sentido.
-es una mujer madura, no mayor, con esa madurez que da haber vivido mucho y tener la experiencia de una vida. Intensa y apasionante. Es decidida y fuerte, es una mujer sexualmente activa sin ser una golfa. admito que no la conozco en persona y que e venido aquí por la historia de un amigo con la esperanza de seducirla, o mas bien, de que me encuentre digno ya que no es una mujer que se deje seducir.
-me temo que tu quimérica mujer no exista mas que como fantasía.
-no lo creo .
-¿por que?
-por la manera en que Ían hablaba de ella.
-¿Como se llama?¡
-Sherida

y puso fin al juego- Si creo que la conozco bastante bien soy yo.
-lo suponía.
Por que no seguimos hablando en un sitio mas intimo. Se termino la copa de un trago y empezó a andar sin molestarse en mirar atrás.
-adonde vamos.
Un amigo mio tiene un piso aquí arriba.
-Y bien cuéntame algo mas de ti cuales son tus sueños y aspiraciones.
-sueños?
-Si, sueños, que es lo que te gustaría hacer en un futuro.
-A pues bueno me gustaría viajar al extranjero no como mochilero o en plan turista me gustaría viajar a un país con una cultura completamente diferente y quedarme el tiempo suficiente para empaparme a fondo en su cultura.
-y no te daría miedo ir a un sitio diferente sin tu familia y tus amigos.
-si,!mucho!¿no? Esa es la razón hay que enfrentarse a los miedos y no dejar que impidan que hagas las cosas que te gustan.
-Interesante. Dijo con una voz sensual .
-Y tu tienes algún sueño algo que desees.
-Oh yo obtengo todo lo que deseo.dejemos ya de hablar.
-no por favor seguro que as tenido una vida de lo más interesante cuéntame más dijo el con una cara de corderillo degollado que no tubo mas remedio que complacerle.

Y estuvieron hablando toda la noche bueno casi toda la noche al final Jorge se quedo dormido como un bebe, era tan lindo. A Sherida eso le molesto enormemente. Tenia ganas de subirse sobre el y despertarle con un polvo de lo mas espectacular, pero esa no era su manera de actuar, asi que se controlo y se limito a dejarle una tarjeta con su numero y una gota de su perfume.
Le escribió pero no obtuvo respuesta hasta una semana después, cuando le llego el siguiente mensaje con una ubicación de gps.-te veo en 15 minutos no pienso esperarte un solo segundo.
Tubo que correr mucho para llegar. Ella le esperaba a la puerta de un local misterioso que se encontraba completamente a oscuras.
Se trataba de uno de esos restaurantes que te servían la comida a oscuras..Sherida había contratado además el paquete intensivo así que les colocaron unos auriculares de aislamiento total . Se dieron de comer el uno al otro mientas se hacían caricias y lo cierto es que con sus otros sentidos bloqueados el tacto y el gusto se le despertaron enormemente y cada pequeño roce era como un pequeño éxtasis. Cuando acabaron de comer estaban completamente despeinados y embadurnados en comida así que les llevaron a un sitio para que se asearan.
Ella empezó a quitarse la ropa y se quedo en ropa interior, luego le desnudo a el y mientras se reía con una voz de lo mas perversa cogió un tarro de un estante y le empezó a trazar dibujos en todo el cuerpo con una pintura especial luego le dejo que el se lo hiciera a ella, pero solo en la zona del pecho. Luego volvieron a salir a la oscuridad pero esta vez se trataba de una sala de baile y la pintura que llevaban empezó a brillar con tonos rosas verdes y amarillos fosforitos. Sonaba un música de bachata. Sherida le agarro del brazo y le condujo hasta el centro de la pista donde se convirtió en la reina de la fiesta. El resto de la gente no podía evitar chocarse constantemente con ese tipo de música y con lineas de color como unica referencia pero ella no a pesar de que solo tenia pintado el pecho sabia como moverse para hacer que pareciera que el pájaro que tenia dibujado, con un gran realismo para mayor merito de Jorge, pareciera vivo de verdad haciéndole aparecer y desaparecer según se iba girando a un lado o a otro.
Estuvieron bailando durante horas y cuando los músculos dejaron de responderle Sherida le metió en su coche y le llevo a un hotel le arrojo sobre la cama y se subió sobre el y estuvo follandole durante horas, tantas como las que estuvieron hablando la otra noche, no dejo que moviera un solo musculo(bueno uno si).Todo fue como una película x y una de las fuertes.
Pasaron una semana luego dos… y así hasta que fueron meses, pero Jorge no se desespero pasaría lo mismo que la otra vez, estaba seguro. Sherida era un espíritu libre que no se ataba a nadie. Pero eso fue hasta que le llego un correo con una beca para estudiar en el extranjero entonces supo que Sherida no volvería.
Sherida normalmente ,no hacia eso, no rompía con nadie hasta que había pasado un tiempo. El tiempo suficiente para ver como se cumplía su sueño. Sherida era lo más parecido que había a un genio, se dedicaba a seducir a hombres y luego darles lo que mas deseaban y ,en el momento en que lo conseguían dejaban de causarle interés, pero la verdad, es que Jorge le importaba tanto que no podía volver a verlo aunque solo fuera una vez.
Jorge estaba empezando a desesperar había estado en todos los lugares donde la había visto, incluso hablo con el amigo que le había dejado el piso, pero el tampoco sabia como encontrarla.
No fue hasta ver a Ían en clase hasta que se le ocurrió preguntarle a el. Llevaba meses sin venir y tenia una cara horrible con ojeras y la cara chupada y la piel áspera y envejecida por el sol, la cara cubierta de demasiado maquillaje .
Lo que había pasado es lo siguiente Sherida le había presentado a algunas de sus amigas maduritas las cuales, le habían llenado de regalos y seguridad en si mismo ,que había usado para ligar con chicas de su edad pero, las primeras se habían ido volviendo mas exigentes y demandaban su atención, y las segundas perdían el interés sino les traía cosas nuevas. Lo cual había acabado en una espiral de halterofilia, cámaras de bronceado mentiras, estratagemas y llamadas a medianoche que le estaban consumiendo ,y de la que no lograba salir.

Y es que como en las mil y una noches hay que tener cuidado con lo que se desea. Algunos deseos están envenenados.
-as visto a Sherida.
-si acabo de dejarla en la plaza san Jose.
Cundo vio venir a Jorge casi le dio un vuelco al corazón. No es que se hubiera ocultado muy bien,tenia que volver a ver a Ían para ver como había acabado todo pero después de eso debería haber desparecido, irse a otra ciudad por un tiempo al menos. quizá lo hubiera hecho intencionalmente, de manera subconsciente, ¡claro¡
La verdad no es que estuviera enamorándose de Jorge es que verle tan inocente y esperanzado le recordaba a una persona,una persona que creía muerta.

No siempre se habia hecho llamar Sherida, hubo un tiempo en que era Marta. Un tiempo en que era joven y estúpida y creía que encontraría a un príncipe azul, con el que se casaría y tendría hijos y lo encontró, o al menos a alguien que le había prometido eso. un hombre mayor que la utilizo,¡ la engaño para robarle la virginidad! y luego, se fue. Otra se hubiera limitado a llorar y injuriar sobre los hombres, pero ella no,no era como las demás ella se había vengado y de una manera de lo mas cruel. En vede matarle o atacarle fisicamente, le había arruinado la vida, y lo había hecho haciéndole cumplir su promesa. había encontrado a una mujer desquiciada y posesiva, y la había puesto en su camino. Ella le acosaba y le seguía a cualquier lado haciéndole imposible ligar con otras chicas y las demandas de acoso no servían para nada. Al final había desistido y se caso con ella lo cual solo le trajo desdichas.

Ahí había empezado todo y había seguido haciéndolo no por venganza o rencor sino por la satisfacción y la sensación de poder que le había dado. No es que todos acabasen mal o que ella supiese de antemano lo que fuese a pasar se limitaba darles lo que pedían y observar el resultado.

Y mientras recordaba Jorge se coloco delante de su mesa.

-Clara puedes dejarnos a solas.
-Me puedes decir que es esto.
-es una beca para estudiar en el extranjero ¿no es lo que querías?
-no te lo pedí.
-pero ahí esta. -y el cogió y lo rompió.
-es solo una copia puedes volver a imprimirlo… Ahj… no volveré contigo por que lo rompas.
-lo se y tienes razón, puedo volver a imprimilo… Sabes no esperaba que esto durara para siempre, solo lo suficiente para poder conocerte y creo que ahora lo hago. Antes creía que eras una mujer liberada, pero ahora veo que no eres mas que una cobarde que teme enfrentarse a la verdad,sabes no se lo que te paso y no necesitas decírmelo pero deberías dejarlo atrás.
Esas eran las palabras que Sherida necesitaba oír. La verdad es que había perdonado a su agresor hace mucho pero hasta ese mismo momento no se había perdonado a si misma.

La verdad es que había seguido haciendo lo mismo, con un salvedad había cumplido uno de los sueños de Marta había adoptado un niño. un precioso niño camboyano

. Jorge vivía ahora en Japón y “se habían vuelto a ver,periodicamente.“

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