-¿Profesor Ignacio?-. -¡Así es! ¡vaya, muchacho!Cómo has crecido-.-Tome asiento-Que no te impacienten mis arrugas y estas manchas hepáticas que parecieran calcinar mi espíritu.Sigo vigoroso como un roble-.Dijo inflando el pecho y azotando el puño contra él.-Eso puedo notarlo,disculpe la cortesía si es que le incomodó-.-¡Bah!Tonterías,no pasa nada. Sólo estaba jugando contigo-.-Cuénteme,profesor¿sigue dando clases en aquella vieja secundaria?-.-No,no.La docencia es algo que he dejado ya hace tiempo.Aquellos chiquillos piensan que este cuerpo arrugado es senil y blando;ya no hay respeto como en esos distantes y viejos tiempos.Bueno,eso,y que ahora soy pensionado-echó una risa ronca y pausada-.-Oh,ya veo-.-Sí,ahora dispongo de todo el tiempo del mundo.Por lo menos del que disponga dios sobre este cuerpo-.-Es curioso,profesor Ignacio, creí usted no era creyente-.-A esta edad uno se cree lo que sea.¡bah! Ya qué más da. Estoy demasiado viejo para andarle huyendo a la muerte. Si llega que llegue-Dijo frunciendo un seño indiferente y calmo.-Ahora disfruto de otro tipo de vida, Fíjate bien-echó al suelo unas cuantas migas y una paloma llegó con sus pasos intermitentes,empezó a picotear buscando la comida-cuando me concentro en las aves puedo ver de ellas lo liviano,revelan sus espíritus indolentes e incorruptibles.Aquellos pesares que no aspiran nuestros dolores;aquella que viene del sustento,la codicia y los anhelos,eso que nos mantiene despiertos frente al sueño que es la vida.-En ese momento la paloma se aventó a los cielos.Ambos nos quedamos sumidos en su vuelo;en el umbral de su destino.Pasados unos cuantos segundos, él continuó.- De una lectura de Schopenhauer me recuerdo haber leído acerca de un perro, la quintaescencia dice él, el “archeus”-Se sacudió de nuevo- En la naturaleza,fíjate muchacho,uno puede ver lo intransigente;la vida inmutable,el mero paso del tiempo.El ciclo sempiterno;la nada idílica-Entonces tomó un aire inmenso,infló el estómago y se quedó inmutable.Pareciera haberse dejado suspendido cuando empezó de nuevo a hablar- Sabes,antes de trabajar en la secundaria en dónde ibas, recuerdo haber sido antes maestro de matemáticas en otra.Pero ,como los niños reclamaban de complicada a la materia ¡harto ya me tenían! enserio.¿Puedes creerlo?-Soltó una pequeña risa inflada-¡complicada!-reprochaba de manera histriónica con las manos-Complicadas no son las matemáticas ni las ciencias;total,¿que otra manera tenemos para vislumbrar al universo’?.¡Las matemáticas buscan ser sencillas!Que nuestra comprensión sea vacua a esos fenómenos,bueno,eso es diferente.¿Quieres saber qué es complicado?El hombre,hijo.El hombre es lo más complicado.¿Quieres saber qué es complicado?-repitió hondamente y con una voz ligerísima,como si tuviera en la garganta un globo que se estuviera desinflando- El amor,el odio,los tratos extravagantes que se da la gente,las guerras y la displicencia que tiene uno con el prójimo;con el mismo tipo de Ser que uno sufre. Las matemáticas ¡bah!¿Qué tienen de complicadas?.Complicado entender al hombre.Primero porque hay que entenderse con uno,con eso ya tienes de sobra para toda una vida;bueno y si lo alcanzas a lograr,no dudaría que muchos,pese a los años que arrastran,nunca se hayan llegado a entender del todo.Ahora imagina poder comprender de forma ecuménica al hombre.¡Nombre!Dios tuviera semejante carga-Entonces empezó a buscar de su pesada gabardina algo entre todas las bolsas que figuraban grandes y pequeñas-.-¡Ajá!–exclamó.En la mano llevaba un libro y lo alzó airado.–Unamuno ¿Alguna vez lo leíste?-.-Lamentablemente dejé las lecturas recreativas pasado el bachillerato.-Bueno,La niebla,¡librazo!,No pienso amargarte el libro, sólo te hablaré de mi parte favorita,ésa donde Augusto,el protagonista de la obra,se revela contra el mismo Unamuno;se revela contra su creador¡contra su misma muerte!–En ese momento fijé la vista hacia don Ignacio,dejándole bien sembrados los ojos.Él me pareció incomodado,alargó la mano hasta mi hombro y con un tono severo me dijo.-Oye ¿estás bien?,de repente me dio la sensación de que dije algo inapropiado-.-Sí,sí.No se preocupe,sólo me pareció interesante-traté de esbozar una sonrisa,pero ésta apenas si la sostenía.-Bueno.Ése ni siquiera era mi punto,sino hablar del hombre.El misterio más grande entre lo nimio, en toda la inmensidad de nuestra parafernalia-.-Disculpe usted la interrupción,don Ignacio,pero me gustaría consultarle algo.Y es justo de la muerte. Ya me han tomado de loco,pero siento la confianza de poder hablarle de esto-.-Anda muchacho, que este viejo también está un poco loco-.-La verdad es que vine aquí sin vocación;con el espíritu endeble y hecho trizas.Tuve mucha suerte de encontrarle, pero ahora también temo de perderle.¿Se pregunta por qué? El porqué es porque me están matando. Así es, y ni siquiera sé quién me dará la puñalada, eso es lo que más me asusta.-Verás, por mi muerte no te preocupes.Como te dije:si llega,que llegue. Pero tu desasosiego es inminente.Se nota que te extingues-.-Así es,¡me extingo y conmigo los extingo a todos ustedes!-.-Pues si es así,sólo te queda una cosa y es tomar venganza-.-¿Venganza?-.-¡claro!- Déjame explicarte:dentro de la literatura,lo que más disfruto son los cuentos. Por supuesto que también están las novelas y demás.Pero el cuento es corto,efímero.Alegoría perfecta de la vida.Nosotros mismos hemos de figurarnos como un cuento;Uno que sólo se hace real a través de los demás.Sólo somos una historia esperando a ser contada.Existimos porqué sentido sino éste que nos deja amparados de lo ignoto.Somos una fugaz réplica de espacio.El sueño corto de cada uno de nosotros: los olvidados por el tiempo.Porque sobrevivimos de manera inmaterial por nuestra historia,por las venturas que escribimos en los hados de la vida. Imagínate en la incepción del mundo. Al abrirse tersamente los cielos, figúrate sobre un pastizal sin mesuras, con el viento arrebatándote el aliento y con los rayos de luz impactándote en las pupilas achicándolas infinitesimalmente.Pero no hay más, sólo tú ahí parado.Con una historia sin ojos, sin cuerpo ni manos.Sólo unas palabras al aire,justo como aquel acertijo del árbol que cae en el bosque.Tú,de igual forma,no puedes ser escuchado,Si sufres ahora por existir, imagínate de esa no existencia. ¿Uno existe por qué?Yo preguntaría a través de qué.Uno sólo existe a través del otro,uno muere de igual forma.¿Puedes creer que pese a ello la gente siga tan sumida en el ego? por eso digo yo»la vida es puro cuento».Si tú has de morir,Entiérrale con tu misma vida;con tu mismo mundo.Sólo existe la muerte para quien te existe.Cuando lo encuentres sólo ríe y dile que él al igual que tú está condenado.

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