Era una niña muy joven llamada Adriana pues su adoración era cantar, y ser una gran escritora, sus padres siempre la trataban mal y lo mas doloroso era que siempre le decían que nunca llegaría a nada, ya que era una niña tonta y horrible.

Biologicamente no era hija , era hija de su única hija que murió de muy temprana edad ya que en el parto falleció y sus padres quisieron tenerla para acordarse de su hija pero no fue lo mismo.

Adriana era una excelente estudiante, siempre lograba premios, reconocimientos, regalos, todo porque era una niña muy aplicada.

cuando adriana solo tenia 5 años, su madre quedo embaraza, una noticia muy buenas y feliz para todos.

10 años después, ya vanesa tenia 10 años, la vida de adriana era un infierno, sus padres la insultaban, la castigaban, porque vanesa le decía que ella le pegaba, solamente para verla llorar.

cumpliendo recientemente sus 15 años adriana se le acerco a su madre y le dijo:

mama, ¿porque no me celebran mis 15 años?

– la madre le respondió, !porque eres horrible y ningún niño va a querer venir a tu fiesta!.

adriana llorando se dirigió a su habitación muy triste.

pasaron muchas cosas pues pasaron los meses.

Adriana se le acerco a sus padres y le dijo:

– papa, mama ya que están felices puedes comprarme una computadora para hacer mi tarea.

– claro que no, sabes lo caras que están las computadoras en esta ciudad, le respondió la madre muy enojada.

– creí que estaban feliz por mi buena calificaciones, respondió adriana llorando.

-claro que no, estamos felices porque mi niña aprendió a escribir muy bien y a leer.

adriana estaba tan triste que se mardecia pero aun así le daba gracias a dios por darle ese hogar.

pasaron 3 años, ya adriana tenia 18 años, termino la secundaria, y estaba iniciando una carrera, los padres de adriana decidieron echarla de la casa, porque era mayor, y ella era peso para ellos.

mientras a vanesa le daban todo.

adriana llorando, solo, triste, con mucho frio, andaba en la calle, por suerte una señora se le acerco y le dijo:

– hola joven, ¿como te llamas?

– me llamo adriana señora ¿ y usted como se llama?

– mi nombre es miriam, ¿y que haces aquí joven, ven vamos a la casa?

la señora le dio educación, le dio trabajo.

pasados 16 años vanesa era muy diferente a adriana ya que la sacaban de la escuela a cada rato, era adicta a los vicios, y solo gastaba y nada mas.

vanesa hizo una deuda en donde los padres de adriana, tuvieron que vender la casa.

pero ya adriana no era una niña, era una excelente arquitecta y escritora, estaba casada con un hombre que era un excelente ingeniero y ambos ganaban mucho dinero.

ya los padres no aguantaban la pobreza ni a vanesa y decidieron llamar a adriana:

– Hola hija, ¿como te va?

– Hola mama, me va muy bien gracias y desde cuando me llamas hija?, respondió ella sorprendida.

– hija vanesa esta insoportable, ya no tenemos dinero, perdimos nuestra casa y ya no aguantamos a vanesa.

– y que quieres que aga mama.

– que nos ayudes hija.

Esta bien mama.

adriana le construyo una nueva cada a sus padres y contrato un doctor privado para que ayudara a su hermana, y todo marchaba bien.

adriana se acerco a sus padres y le dijo:

– mama, vuelvo a casa, yo tengo mi propia familia la cual ya tengo que atender.

-hija, perdóname, nunca te valore, te odie porque en realidad no eres nuestra hija eras hija de un hija que tuvimos tu padre y yo, le llamaban vanesa.

– mama no los odio. los amo porque me dieron un hogar, me dieron una hermana, me dieron una buena vida y eso se los agradezco.

– no hija perdónanos, te abandonamos cuando mas nos necesitabas.

no pasa nada mama.

esa fue la despedida de adriana.

ya todos los meses se veían y eran muy felices.

vanesa entro nuevamente ala escuela, y los padres de adriana, decidieron trabajar y construir un negocio.

y todos fueron felices.

Esta pequeña historia me deja un hermoso mensaje, aveces decimos que odiamos nuestros padres porque no nos quieren, o porque no nos compran algo, pero al contrario, debemos darle gracias a dios por todo, porque existen muchos niños que no tienen nada, debemos ser valiente como lo fue adriana, y mira todo lo que obtuvo porque fue obediente y muy respetuosa.

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