Se sentía sanada de tantos males del alma. Se hacía muchas preguntas.¿o no eran tantas? Ahora sólo eran conclusiones a base de meditar.¿Le pasaría a todas las mujeres igual? También a los hombres. Sabía que no era cuestión de sexo, sino de seres humanos. Los había de todo tipo; débiles,dependientes,egoístas, sinceros,nobles y…violentos. Muchos lo son, física y psíquica-mente, cuando se sienten amenazados por el sentimiento de la pérdida, el miedo al abandono, a la soledad.¿Cuándo empiezan a cambiar las cosas?¿En qué momento?¿O son los actos egoístas, voluntarios o involuntarios los que desembocan en la pérdida?

Allí estaba, frente al espejo.

Le gustaban hasta las arrugas del entorno de sus ojos. Le hacían recordar sus comienzos, el amor.

Una mañana amanece y no reconoces a la persona que tienes junto a tí. No te reconoces en esa mujer madura.En el día a día hay tanto barullo que no percibimos los cambios. Los tuyos, los de otros. Un día despiertas y llega la sorpresa.

¿En qué momento comienza a darte miedo oír sus pasos? El amor se transforma. Es fácil dañarlo. Reproches, abandonos, silencios…

Ahí estás.

Ya no tienes ganas de riñas y desencuentros. Ilusión,pasión,enamoramiento. ¿Es amor de verdad? Cambió mi concepto sobre él . Fue con los años. Ahora ves entrega, comunicación, respeto, ternura. Dejar a otro su espacio. Que sea feliz en el.

Un enfado lleva a otro, al anterior reproche, las rencillas viejas que afloran. Y llegan los insultos, bofetadas y más silencios.No sabemos cuando va a nacer un sentimiento pero sí cuando va muriendo. Madurar trae estas cosas. Lo que ayer quisiste no lo quieres hoy. Lo que ayer sacrificaste hoy quieres dejar de hacerlo.

El mañana se vuelve tuyo y cada día una apuesta por tí. Así entiendes, que no hay mayor cárcel que el miedo y la culpa.

¡Fuera culpa, que se quede en este espejo! Te miras y te das cuentas todo lo que la vida te ha enseñado.

Ahora, el pasado es una película, vieja, que ya no quieres ver y el futuro no quieres vivirlo en el presente. Has empezado un nuevo caminar, donde eres dueña de todo; lo bueno y lo malo.

Pero hay más a salvar; esta sociedad, el entorno, que no perdona. Lenguas que son hachas y corazones revestidos de hielo. Las críticas de otras mujeres, como tú, lo que menos se comprende. Aunque tú cometas el mismo error y luego te duela.

Ahora nada importa.Teresa salía al trabajo, con la cabeza alta, paso firme y el corazón cicatrizado.

Camina con seguridad, deja la película en el espejo. No tendrá una segunda oportunidad sino muchas oportunidades. Le gusta su vida, su gente,ama a su hija. Cree en el amor.

Venían muchas cosas buenas de él , aunque también sacaba lo más ruin del ser humano. Como llegar a la locura de quitar la vida a quien un día fue su vida y le dio vida.

Pero a pesar de todo, ella, nunca dejaría de creer en el amor.

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