Querido amor, no mío.

Hola extraño, han pasado ya dos meses de que nos vimos por última vez, dos meses en que nuestros labios se fundieron en un último beso y me ha costado como no te imaginas sacarte de mi cabeza; he perdido contacto casi total con ese ser que teníamos en común, con él quedaron pendientes algunos asuntos que al igual que contigo nunca sabré si será posible hablarlos.

Mi subconsciente me ha jugado más de una ocasión una mala jugada al traerte de regreso, así mismo este mes (diciembre) es algo ácido como los dulces que me gustan comer; ya que este mes si tú también lo recuerdas se cumple un año de que pasamos juntos nuestro primer momento y me gusta recordar al pie de la letra lo que pasó ese día; aquel 30 de diciembre de 2022 es algo nunca olvidare y más teniendo como ficha clave más de un escrito de ese día que he guardado.

A lo mejor preguntas el porqué del título, bueno decidí llamarlo así porque siempre fuiste eso, mi amor, pero no mío; siempre has sido como esa ave que va y viene volando libre sin que se quede en un solo punto para hacer su nido; incluso está llegando a mi mente aquél 14 de febrero cuando mandaste el escrito diciendo “feliz día amorcito “, sabes aquel día sentí tan bonito cuando me llamaste de esa manera que incluso yo también en un mensaje te envié un texto incluyendo la palabra. No he borrado todos los mensajes que llegamos a intercambiar, por más que quisiera no puedo darle en eliminar y lo más cómico de todo es que volví a seleccionar los mensajes que había quitado como los favoritos; lo único que he borrado es el registro de todas tus llamadas, más de cincuenta llamadas fueron borradas de mi registro, pero siguen latentes pequeños fragmentos de ellas en mi mente.

¡Ay, querido amor no mío! Quisiera que leyeras todos los escritos que te he hecho, que gracias a ti mi inspiración sigue presente en algunos ratos; querido amor no mío, espero de vez en cuando pienses en mí porque yo lo he estado haciendo.

Sabes esta semana he ido al hospital donde trabajas, iba con la intención de dejarle algo a mi médico que me ha estado acompañando en mi proceso; desde que cruce la puerta del lugar donde me habías comentado la última vez en que estabas mi corazón latía más desesperado; parecía que mis pasos iban quemando y dejando rastro de mí para que fueras detrás mío como todas las películas, pero eso no iba suceder, porque uno era día en qué tú descansabas y dos porque si no lo hiciste una vez, nada me aseguraba que está vez si lo harías. Incluso llegué a sentir un gran nudo en la garganta, ya que cada vez pasaban más autos a mi lado parecidos al tuyo y por un momento pensaba que te vería, me subí al autobús que me llevaría a casa y el nudo quería salir, pero tuve que pasarlo y aguantar más ganas de llorar, por todo lo que no vivimos y no te dije aquel último día en que nos vimos.

Querido amor no mío, espero estés intentando ser feliz, ya que hay una personita que necesita verte de manera estable y que le des el mejor ejemplo posible; hasta de él me he estado acordado, de aquella vez en que me equivoqué al decir un número incorrecto, incluso descargué la canción para no olvidarme de mi pequeño no hijo, me hubiera encantado mucho conocerlo en persona y haber pensando en que tú estabas de acuerdo con ello me había puesto muy feliz.

Bueno querido amor no mío, cuídate por favor, recuerda que me pone algo nerviosa saber que vas conduciendo a estas horas 22:23 p.m. a tu casa para llegar al lado de esa personita que te llama “papá”; quizá no te vuelva a ver y si lo hacemos sería porque el universo nos quiere juntos, yo dejaré entrar a una nueva persona a mi vida, quiero intentar borrar de mi cabeza tus besos, tus caricias por mi cuerpo, tus palabras que me ponían un tanto nerviosa y tu forma tan única en hacerme sentir en confianza para que pudiéramos avanzar en lo que fuera que estuviéramos formando y no consolidó por falta de estructura.

Nunca te lo dije querido amor no mío, pero yo te amo y te ame; pero es tiempo en que me ame más a mí misma que a ti; dale un beso a mi niño, que espero siga siendo el niño revoltoso e inteligente que siempre me contaste.

Con amor, de tu chica especial.