Camina sonriendo, llena de sueños,

mirando hacia el mar plena de alegría,

en el cielo ve a las aves sin dueños,

es de ellos su alma y, su melancolía.

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¿Dónde está el amor, el ruiseñor,

que le libere el gorrión de su pecho?

solo está la vil rosa, la cruel flor,

que la tortura en su cama, en su lecho.

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Cenicienta, en tu ruta hay un varón

que de lejos te entrega una sonrisa.

Cenicienta late tu corazón

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y sin razón tu cuerpo paraliza.

Cenicienta, ¡huye! que la pasión

después que fenece deja cenizas.

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