sueños de fantacias

Carlos era un hombre común y corriente, con una vida normal y rutinaria. Todos los días, se levantaba temprano para ir a trabajar en la oficina, donde pasaba la mayor parte del día frente a su computadora. Sin embargo, un día todo cambió.

Mientras caminaba hacia la oficina, Carlos se dio cuenta de que algo era diferente. Las hojas de los árboles tenían un tono dorado y brillante, y el cielo estaba más oscuro de lo normal. A medida que avanzaba por la calle, las cosas a su alrededor comenzaron a distorsionarse. Las personas parecían moverse en cámara lenta, y los edificios parecían cambiar de forma.

De repente, Carlos se encontró en un mundo completamente diferente. Estaba rodeada de criaturas extrañas y fantásticas, como unicornios y dragones. También había personas vestidas con trajes extravagantes y llevando armas de otro mundo. Al principio, Carlos estaba aterrorizado, pero pronto se dio cuenta de que no estaba solo.

Una joven llamada Avic apareció de la nada y lo guio a través de este mundo desconocido. Ella le explicó que había caído en un portal mágico que le había llevado a un universo paralelo. Carlos, al igual que Avic, estaba buscando una manera de regresar a casa.

A medida que pasaban los días, Carlos se adaptó a su nuevo entorno y aprendió mucho sobre la cultura y las costumbres de este mundo mágico. Avic se convirtió en su guía y amiga, y juntos exploraron los reinos más allá del que habían caído.

Sin embargo, Carlos no podía olvidar su vida anterior. A pesar de la emoción y la aventura que había encontrado en este mundo nuevo y desconocido, sabía que tenía que regresar a casa. Avic prometió ayudarlo y juntos buscaron un portal que lo llevaría de vuelta a su hogar.

Finalmente, después de mucho buscar, encontraron un portal que los llevó de regreso al mundo humano. Carlos se despertó en su cama, como si nada hubiera pasado, pero sabía que nunca olvidaría su aventura en el mundo mágico.

Desde ese día en adelante, Carlos se despertaba todos los días con una sensación de asombro y aventura. Sabía que nunca volvería a ser el mismo después de haber vivido en dos mundos diferentes. Y aunque extrañaba a Avic y a todas las criaturas mágicas que había conocido, se sintió agradecido por haber tenido la oportunidad de vivir algo fuera de lo común en su vida ordinaria.