Mi querido gran amor. Has sido el centro de mí vida durante casi 2.000 días. Lo he dado todo por ti. Pero hoy ha llegado el día de aceptar.

Aceptar que llegó la hora de romper ese extraño hilo que nos une.

Aceptar que en tu vida hay otra persona que en este momento te da lo que tú quieres y que por alguna razón nunca me has dejado que te dé yo.

Acepta que yo tengo que cúrame para emprender nuevos viajes de vida y volar como una mariposa.

Aceptar que la magia que ha habido entre ambos ha cambiado su energía.

Tú sabes que cuando me necesites me vas a tener, pero de otra manera.

Te amo, por eso acepto. Aunque esa aceptación aún duela mucho, sé que es lo mejor para mí.

Sigamos nuestros caminos, mi querido gran amor ¿platónico?


(Pongo el testo de la postal por si hay alguna persona con diversidad visual y no puede leerlo desde la postal)

Tu puntuación:

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS