Detrás del sello

Estimados compañeros del Club,

¡Socorro! Sacadme de aquí. 

Llevo ya mucho tiempo recorriendo los pasillos del Club sin encontrar la salida. De acuerdo sí, me he adentrado en mundos maravillosos a lomos de elefantes, he surcado los cielos en globos de colores, he viajado con maletas donde ya no cabía nada, con maniquíes que no tenían billetes. He disfrutado de la delicadeza de Haijin talentosos y he paseado por bosques de la mano de Caperucita Roja y su lobo feroz. He caminado de puntillas por encima de 100 palabras y me he sumergido en sopas de letras y de tomate. Durante el trayecto he conocido a seres entrañables, verdaderos compañeros de viaje, pero ya ha llegado la hora de volver al salón de mi casa, a disfrutar en compañía de los míos, a mi biblioteca de libros queridos y usados, a mi sillón de piel girada y mi escritorio de madera de acacia. Allí me esperan mis hojas en blanco.

Distingo una luz tenue alrededor de lo que parece ser un sello. Empujo suavemente. Noto que se mueve. ¡Por fin!

Hasta pronto amigos 😊

Dominique