Cayó la flor marchita sobre el charco que se armó después de esa sudestada .
Ayer eran felices mirando el cielo estrellado sin nubes, paseaban de la mano, pensando en proyectos y sueños juntos. Quien diría que un amor puede ser más fragil que una flor que ayer estaba prendida y llena de fulgor regalando su belleza en la rama más alta de ese árbol que los miraba celosos la noche anterior?
Él rompió su corazón y ella sintió que él se estaba suicidando delante de sus ojos, en su mente se imagino que tomaba un arma, se la puso en el pecho, giró el gatillo y estalló la bala dentro de su tórax en ese instante para ella murió, junto con su amor. Ese hombre que amaba ya estaba muerto, él la traicionó y no había una manera más cruel que matarlo con su mente. Así como en un segundo se desprendió la hermosa flor, se fue el amor de esos dos que caminaban horas antes de la mano.
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