EL CIELO, EL INFIERNO, Y LA NADA

EL CIELO, EL INFIERNO Y LA NADA

Tres palabras, que definen perfectamente a quien escribe.

El Infierno, para toda esa chusma que a las personas va jodiendo.

El Cielo, para la buena gente. Personas de buenos sentimientos. Para quienes en la vida, al igual que yo, pasan sufriendo.

La Nada más absoluta, para quienes, no son ni personas, ni chusma. Los que no saben ni lo que quieren. Pero a las buenas personas, sabiéndolo, o no, hacen que estén sufriendo.

Estos últimos, son los más peligrosos.
Se envuelven en sus capas de santas, te intentan marear, parecen lindos corderos, y… resultan más peligrosos, que una familia hambrienta, de Osos.

Yo, prefiero a las chusmas, pues sé cómo tratarlas. Las buenas personas, a mí, que se acerquen, mil abrazos les daré, del Alma.

Los últimos, es decir, los indefinidos, más vale que me conozcan de oídas. Sería más triste para ellos, mis espantos y bufidos.

AUTOR : Angel Márquez Díaz