Pecado de la soberbia

El TopBar

Celebrando los caprichos de la vida estaba yo sentada en un bar rodeada de amigos que en ese momento estaban en mi misma sintonía , todos reíamos y bromeábamos de nuestras diferentes culturas , brindábamos mediante cada risa despidiéndonos así hasta nuestro próximo encuentro.

El bar humilde con paredes de madera y su estilo rústico, brindaba una atmósfera cálida y cómoda donde todos quisieran pasar el rato menos yo ya que había insistido en ir a un lugar con mejores instalaciones. Me parecía que se derrumbaría en cualquier momento pero la mayoría estában a favor de ir allí así que por demócrata idea ese fue nuestro lugar de encuentro.

Al ver mi reloj vi que se hacía la hora de irme ya que mi próximo viaje donde un avión que despegaria hacia un destino que hasta ahora desconozco me esperaba.

Tome mi último trago y juntando mis cosas rápidamente me fui, al atravesar la puerta de salida pude sentir un enorme estruendo y vi de reojo cómo el piso del bar se hundió con todos sus clientes incluidos mis amigos pero mi orgullo por ya haberlo advertido no me permitió mirar atrás por lo que seguí avanzando. En mi camino alguien se acercó presentándose cómo Zyc este hombre de serena mirada y modesta apariencia insistió en acompañarme pues insistía en que veía él lo que yo no, me transmitía por algún motivo seguridad así que emprendimos marcha juntos.

Al llegar a la esquina se terminaba de instalar un parque el cual no podía evadir para llegar a mi destino , sería cruzarlo y seguir en mi apurada lucha por no perder el vuelo.

Ingresamos y pude ver a Zyc detenerse para dar paso a unos seres descalabrados con extraña apariencia, ignorando la situación dije:

  • Zyc te da miedo? Necesito seguir no puedo esperar, lo siento pero llevo apuro.

Zyc fijo su mirada en mis pasos omitiendo mi insulsa pregunta y sin más responder quedo recostado sobre una pared y solamente me observo.

Tan pronto me aproximaba a las atracciones se me olvidaron mis apuros , olvidé mis compromisos. Solo mi alta ilusión por esos deslumbrantes juegos que veía al pasar aunque la música que sonaba sin parar no ambientaba lo que se veía ; se reproducía sin parar una y otra vez la misma canción como si estuviera en una película de terror me generaba cierto temor que se mezclaba con la sensación de entusiasmo por descubrir cada rincón.

Pecado de gula.

El túnel kamikaze.

Nomas ingresar sentí una Transformacion de mi cuerpo abrupta y repentina tras lograr dar ese paso que sin saber me condenaría a lidiar con un sobrepeso extremo donde cada parte de mi inmenso cuerpo pesará lo que una roca, con excesiva sudoración que me goteaba sin descanso. Agobiando en esta situación noté mi única salida, una acanalada tubería de metal la cual apenas entraría mi cuerpo y en mi desesperación por huir no dudé en atravesarla, podía sentir la chapa caliente quemando mi piel, casi sin oxígeno del sofocante calor que emergía allí dentro y arrastrándome cual si fuera una enorme babosa logré salir y ahí estaba Zyc nuevamente quien se proclamaba ser mi guía.

-Antonia veo que lo lograste y me enorgullece ver cómo sin saberlo acabas de pagar alguna de tus deudas en la tierra. Todos debemos de aprender autodisciplina y comer con moderación.

A lo que yo respondí susurrando ya casi sin fuerzas con llagas entre los labios y una apariencia estremecedora.

-Dios se apiade de mi.

Pecado de la lujuria.

El louvre del placer.

En mi intento de huir de esta experiencia pasada y mientras mi cuerpo se reacomodaba a su estado físico habitual pase por delante con mi deambulante ya mirada puede ver una bella pirámide con paredes de cristales , como si fuesen de vidriera habían individuos en su interior ninguno de ellos llevaba ropa consigo en cambio todos lucían deslumbrantes máscaras de diferentes Catrinas, se oían gritos desopilantes entre risas y llantos que se mezclaban con esa música tétrica que resonaba en todo el parque.

Zyc me sugirió no entrar ya que él allí no entraba por proteger su cuerpo físico, me hizo dudar sobre lo que quería decir así que opté por tomarlo cómo consejo y avancé de prisa.

Pecado de la avaricia.

El cuarto de la recompensa.

Mi ingenua pero tentadora idea de abrir esa puerta me sumergió en una habitación a la cual quien ingresaba casi cómo si se sacara la campera te succionaban horribles parasitos todas tus emociones, asi que allí ya no sentí miedo ni angustia tampoco ira…

La consigna parecía simple, crecería mi cuenta bancaria con cada ecuación resuelta y la llave hacia la salida sería una codificación del último resultado o renunciar a cada centavo que me correspondía Aún antes de entrar y ser libre de tal tortura.

Mi cerebro sobreexcitado por la avaricia de conseguir la mayoría de los resultados posibles con números que veía crecer y crecer , escribiendo las paredes en una ayuda desesperada por resolverlos . Comenzaba a sentir una intensa migraña que por reflejo me llevó a pasar mi mano por la cabeza y pude notarme mega cefalicamente deformé sin poder si quiera preocuparme no lograba detener esos razonamientos numéricos, por momentos mi organismo colapsaba y hacía repetidos síncopes al borde de convulsionarme.

Escuchaba mi propia voz gritar en mudo Y mis ojos sollozos ya no lograban ver con claridad pero sentí su mano sobre mi hombro tumbándome en el suelo donde proclamé rendirme y salir de allí. En medio de mi confuso estado mental no distinguía si el piso bajaba o el techo subía solo supe que funcionaba cómo un ascensor devolviéndome al parque.

Pecado de la pereza

Carrera espacial magica .

Tras una larga y lenta fila por la emoción que generaba esta atracción, por fin llega mi turno, para darle inicio a la nave que se me asignaba debía atravesar la pista. Una pista con música tenebrosa que retumbaba mis oídos y atemorizaba mis sentidos. Tan pronto sonó la campana se activó una nube de humo rojo que nublaba la visión a distancia. Mi caminar se sentía cómo si una fuerza aún más grande que la de gravedad me absorbiera hacia atrás en un intento por avanzar, con constantes advertencias de los duendecillos que iban en mi dirección contraria y mi empeño por llegar a la nave aparece Zyc y tomando la mano me impulsa fuertemente ayudándome a llegar, nomas sentarme para acelerar y que esto acabará entré en un sueño profundo pero consciente todos mis reflejos motrices estaban dormidos solo mi consciencia que me obligaba a ver a mi alrededor y a velocidad de una batimovi con una mínima seguridad ya que solo alcancé a abrochar el arnés, di vueltas y vueltas de subidas y bajadas en estado de shock en estado de pánico … desperté al terminar con la agitante sensación del cansancio , bajé con mis piernas temblorosas queriendo escapar.

Me tarde 24 minutos en dar 10 pasos hacia el próximo juego con mi cuerpo desmoronado, deseaba terminar el recorrido solo pensaba en la salida que se comenzaba a asomar se veían a Corta distancia varios rombos de colores proyectados en el aire llegando vi que era un puente donde las personas jugaban de a pares por cada color del arcoíris un par, cada par podría obtener algo del par de adelante, noté que todos se miraban pero ninguno se veía , los carteles luminosos anunciaban a este juego cómo el “Puente arcoíris” (pecado de la envidia).

En este punto Zyc había decidido no seguir conmigo ya que el parque terminaba y afuera no había nada que a él lo esperara , me fui casi sin despedirme y al llegar a casa comencé a gritar de enojo y furia , por tan tontas desiciones mis tiempos me jugaron en contra haciéndome perder el viaje que me llevaría a algún lugar , comencé a romper los utensilios de cocina dejando salir toda mi ira y culpa de lo sucedido en pocos segundos la casa se convirtió en un caos. (Pecado de la ira)

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