Esto solo está en mi pecho,

Pero con cada coma no frena,

Cada punto la enlaza, en lo cursivo sale recto

Es un halo de paz que envenena.


Esto solo está en mi pecho

Pero el cadáver que mi cuerpo carga ya no lo resiste

Mis dendritas aguantan las sobrecargas como embistes

Las vigas de calcio no siempre cargan los cimientos de su techo.


Esto solo está en mi pecho

Pero qué hacer más que objetar a la sombra

Callar a los cuatro vientos

Morder mis palabras, dejando estática la línea de la boca.


Esto solo está en mi pecho

Pero la dificultad de revertir conceptos nace del primer paso,

De risa estallo al cosechar frutos que germinaron secos

El final del andar resulta nacer en el principio del trazo.


Si la dicha es cruel para el corazón del diácono

Para este diaño, es mejor cerrar el convento

Pero solo es un engaño, una alerta al silencio

Esto está solo en mi pecho

Etiquetas: pensamiento poesía

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