Cuando haya partido

Cuando haya partido

Dejaré mi impronta en todos mis escritos

donde se desnuda el alma y cantan los grillos.

Descubrirás en mi ánfora mis penas y olvidos.

Cuando haya partido mira mis adentros

tú al lado mío y el amor profundo

que nos prometimos.

Cuando haya partido, no quieras retenerme

pronunciando mí nombre en el vacío,

aférrate a mi risa, a lo que construimos

deja andar la pena como corre el río.

Cuando haya partido busca mi almohada

encontrarás en ella todos mis latidos.

Abraza con fuerza a nuestro hijo

recuéstate en su hombro, busca su cobijo.

Cuando haya partido, no quiero coronas

ni velas, ni cruces en mi despedida,

solo jazmines regados de rocío,

una bella melodía que aquiete el alma

que eleve el espíritu.

Abraza en mi nombre a todos los amigos

a toda la familia y también conocidos

y dale las gracias de haberme permitido

transitar en su mundo que también es el mío.

Cuando haya partido deposita en mi pecho

esas rosas rojas de nuestro compromiso.