Nirmuria, constelación de Perfones en Duerneter, la estrella de las tormentas huracanadas, la musa “Denufnostenes” moviliza la velocidad de la evolución del universo a partir de la dinámica de sus canciones. Esta diosa acelera o aminoriza el tiempo en las infinitas dimensiones, tanto en los sueños como en la vigilia en todos los seres existentes donde afecta su tiempo experencial. De ahí que en Fritania sus habitantes le pidan alentisar o acelerar diferentes vivencias que los seres esten aconteciendo. Sin embargo esta particularidad de Denufnostenes es debido a la admiración de Permitofteles, un espíritu que importuna a la diosa en sus estados de vigilias con sus truenos, lluvias y tormentas, haciendo que la muza se asuste, esta se incómoda con su impronta energética y caótica ya que no conoce las intenciones ni anhelos de este dios. Denufnostenes suele caer bastante seguido en este estado de vigilia, ya que al jugar tanto con el tiempo esto afecta su descanso y es así que cae en la cuenta de esta alteración en su ritmo circadiano cuando aparece Permitofteles. “ Denufnostenes” se esconde de Permitofteles en fragmentos de los diferentes mundos donde estan aconteciendo tormentas con fuertes lluvias, ya que sabe que en dichos mundos puede camuflarse de Permitofteles, así la muza mantiene cierta distancia con este espíritu misterioso para ella. El vinculo particular entre ambos nace de la siguientes ruptura asimétrica, Permitofteles era el proto-espiritu de la quietud sin cualidad, existiendo en el más allá de todas las dimensiones, era el no-ser, la negación de la negación, siendo la negación necesaria para que surja cualquier inquietud. En el contra plano descansaba Denufnostenes, donde vivía dormida soñando en su libre albedrio, donde en sus sueños todo era posible a su voluntad. Sin embargo en ella invadía de cuando en cuando la inquietud de no saber que es estar despierta, de esta manera sentía el libre albedrio como una máscara que escondía una limitación, como si fuera una cárcel pintada de colores agradables. Una noche en los sueños apareció Gloutormestis, el espíritu de la inquietud y la osadía, se le acercó y le preguntó, ¿si te despierto que es lo primero que harías? A lo que la diosa contestó; “cantar”, quiero escuchar mi voz como suena en el mundo despierto. A lo que el dios la despertó de inmediato al quedar conmovido por su respuesta, y es así como ya en este nuevo estado de gnosis improvisa su primera melodía. Dicha resonancia de la ejecución de su registro vocal genero en Permitofteles una conmoción que lo sacó de la quietud, y desde ese momento el movimiento y respiración agitada se apodero de el, ya “despierto” generara truenos, lluvias y tormentas vaya a donde vaya , siendo el precio que tuvo que pagar por su despertar. Permitofteles quedo enamorado y conmocionado por las melodías que llegaron a sus oídos, esta música se hacía sentir entre los rayos y truenos que lo acompañaban permanentemente. Es así que para intentar aminorar la intensidad de los truenos y tormentas que lo acompañaban permanentemente, meditaba he intentaba calmar su alma, para así poder oír las hermosas melodías de la diosa que solo son interferidas por una pequeña lluvia sutil con truenos tenues. Es de ese momento que el dios fantasea y juega con el tripode temporal del el antes, durante y después, intentando estar en el antes para ser la inspiración que daría nacimiento a la primera melodía que la diosa improvisó, el durante siendo la primera persona en escuchar dicha melodía en su primera ejecución, y en el después donde toda ejecución futura este precedida por el recuerdo en la mente de la musa del encuentro con él. De ahí en más en los intentos de acercamiento de Permitofteles generaban una desmesurada expresión de sus truenos, lluvias y tormentas asustaban a la musa. Denufnostenes ante la duda intentaba despistar y cansar a Permitofteles alentizando y acelerando los tiempos y refugiándose en tormentas y lluvias fuertes, ya que en estos paisajes la diosa queda totalmente camuflada. Permitofteles siempre espera paciente, sabe que su imagen es intimidante, es por eso que solo la contempla esperando a que la diosa se traslade de algún lugar del universo a otro para observarla, ya que Denufnostenes no tolera estar acerrada ni escondida mucho tiempo, y es en el movimiento de un refugio al otro donde el espíritu puede admirarla, ¿sabrá algún día la diosa las intenciones de Permitofteles?
Bazán Aldo Sebastián.13-10-2020
OPINIONES Y COMENTARIOS