ICTÉRANO

En la inmensidad del océano, vivía un caballito de mar

Su nombre era ictérano, su gran ilusión, cabalgar

Ictérano por las mañanas, saltando iba a trabajar

Contando él trabajaba, cada una de las estrellas de mar

Un dia encontró una de ellas, triste y llorando sin parar

Ictérano la preguntaba, si con su colita la podría consolar

La estrellita compungida, contestó rápida sin vacilar

Mi llanto no es de la tierra, mis lágrimas salen del mar

Qué produce tu tristeza, Ictérano quiso de la estrellita sacar

Con tantos brazos que poseo, no tengo a quien abrazar

La estrellita contestaba, a Ictérano, nuestro caballito de mar

Ángel Márquez Díaz

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS