Amanecía
Y una tenue luz, se colaba por la cortina
apenas podía abrir los ojos
intentando recordar que día era…
Mire fijamente el nacer del sol y de aquel nuevo día, estaba paralizado.
Un instante más…
Me doy cuenta, que ya no recuerdo tu nombre, perplejo me he detenido.
No puedo llevarlo más en mi boca, he dejado de reconocer las letras que lo conforman.
Ahora solo queda un espacio negro, un silencio.
Tantas veces he olvidado tu nombre.
tantas veces he añorado dejarte en el olvido;
cuantas veces han sido…
ahora con sorpresa y tanto de tristeza reconozco
que no me es posible cerrar lo ojos y poder verte.
Que ya no puedo repasarte e inventarte una y otra vez.
Ya no puedo, ya no debo y ni siquiera soy capaz de hacerlo.
Hoy he desatado esa cuerdita, he desintegrado ese candado que contenía tu nombre.
Hoy sé que infinidad de veces he olvidado tu nombre.
Pero hoy se ha esfumado…
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